Zelenskiy resalta el rol de Trump para detener la guerra en Ucrania: «Sin EE. UU. no es posible tener garantías de seguridad»

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, dijo que las garantías de seguridad para que Kiev ponga fin a la guerra con Rusia sólo serán efectivas si Estados Unidos las proporciona, y que esperaba reunirse con el presidente electo estadounidense, Donald Trump, poco después de su investidura.

En una entrevista con el podcaster estadounidense Lex Fridman publicada el domingo, Zelenskiy indicó que los ucranianos contaban con que Trump obligara a Moscú a poner fin a su guerra y que Rusia se intensificaría en Europa si Washington abandonara la alianza militar de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Casi tres años después de la invasión rusa, la elección del dirigente republicano, que regresa a la Casa Blanca el 20 de enero, ha despertado la esperanza de una resolución diplomática para detener la guerra, pero también temores en Kiev de que una paz rápida pueda tener un alto precio.

Zelenskiy utilizó la entrevista de tres horas publicada en YouTube para pedir la membresía de Ucrania en la OTAN, enfatizando su creencia de que un alto el fuego sin garantías de seguridad para Kiev simplemente le daría a Rusia tiempo para rearmarse para un nuevo ataque.

El líder ucraniano sostuvo que la Casa Blanca bajo Trump tenía un papel vital que desempeñar en brindar garantías de seguridad y afirmó que él y el presidente electo de Estados Unidos estaban de acuerdo en la necesidad de un enfoque de «paz a través de la fuerza» para poner fin al conflicto.

«Sin Estados Unidos no es posible garantizar la seguridad. Me refiero a las garantías de seguridad que pueden impedir la agresión rusa», afirmó, reconociendo tácitamente que los aliados europeos de Kiev serían demasiado débiles militarmente para arreglárselas solos.

Zelenskiy argumentó que el presidente ruso, Vladimir Putin, no estaba interesado en entablar negociaciones serias para poner fin a la guerra y que habría que obligar al líder del Kremlin a detenerse y aceptar una paz duradera.

La situación en el campo de batalla es la más desafiante para Ucrania desde los primeros meses de la invasión rusa de 2022 y las tropas de Kiev, en gran medida superadas en número, han estado perdiendo aldea tras aldea en la región oriental de Donbas durante meses.

Aunque reconoció que dependía de Estados Unidos determinar su futuro, Zelenskiy advirtió que cualquier decisión de Washington bajo el mando de Trump de salir de la OTAN debilitaría la alianza militar y envalentonaría a Putin en Europa.

«Simplemente digo que si lo hace (renuncia a la alianza), Putin destruirá Europa», afirmó.

El líder ucraniano declaró que necesitaba sentarse con Trump para determinar un curso de acción para detener al Kremlin y que los gobiernos de Europa también necesitaban tener voz en ese proceso antes de que Kiev pudiera sentarse a conversar con la parte rusa.

VISITA A UCRANIA

Trump, añadió el líder ucraniano, había indicado cuando hablaron a finales del año pasado que habría una visita oficial ucraniana a Estados Unidos poco después de que asumiera el cargo.

«Me dijo por teléfono que mi visita sería una de sus primeras. Este tema es importante para él. Espero que nos conozcamos», afirmó.

El líder ucraniano también informó que asistiría a la toma de posesión de Trump el 20 de enero si recibe una invitación oficial.

La entrevista fue publicada la tarde después de que las tropas ucranianas lanzaran el domingo una nueva ofensiva en la región rusa de Kursk, donde crearon un enclave en una incursión sorpresa en agosto pasado.

Ucrania lleva meses diciendo que Rusia ha desplegado miles de tropas norcoreanas en la región de Kursk para ayudar a sus fuerzas allí.

Zelenskiy estimó que 3.800 soldados norcoreanos habían muerto o resultado heridos en los combates hasta el momento, pero que creía que Pyongyang tenía la capacidad de enviar muchos miles de soldados más si decidía hacerlo.

También aseguró que Corea del Norte había proporcionado 3,7 millones de proyectiles de artillería a Rusia hasta el momento, una cifra que contrastó con el millón proporcionado por la Unión Europea el año pasado.

Reuters