Violencia en las afueras del Congreso argentino tras ratificar el veto presidencial: Agredieron a un reconocido youtuber
El presidente de Argentina, Javier Milei, ha ejercido su poder de veto por primera vez desde su asunción, marcando un hito político en su mandato. La decisión fue recibida con fuertes críticas desde sectores opositores, mientras que en las inmediaciones del Congreso, se registraron disturbios y violencia entre manifestantes, culminando con la agresión al popular youtuber Fran Fijap, conocido por apoyar las ideas libertarias.
La Cámara baja del Congreso de Argentina no logró el miércoles reunir los votos necesarios para revertir el veto del presidente Javier Milei a una ley que habría aumentado el financiamiento de las universidades, una victoria para el líder libertario que busca reducir el gasto público y sostener el déficit cero.
“Este veto es una muestra de nuestro compromiso con un Estado más pequeño y eficiente”, declaró Milei durante una conferencia de prensa. “No podemos seguir manteniendo un modelo que no ha hecho más que empobrecer a los argentinos”.
El veto generó inmediatas reacciones tanto dentro del Congreso como en las calles. Los legisladores de oposición denunciaron la medida como «antidemocrática», mientras que los líderes de diversos partidos de izquierda calificaron el acto como una “traición” al pueblo y advirtieron sobre las consecuencias sociales que podría tener.
Violencia en las afueras del Congreso
Mientras el debate sobre el veto tenía lugar en el Congreso, afuera se desató un clima de tensión que rápidamente escaló a violencia. Grupos de manifestantes opositores al gobierno de Milei, en su mayoría pertenecientes a facciones de izquierda y agrupaciones sindicales, se congregaron para protestar en contra de las políticas del presidente.
La manifestación se tornó violenta cuando un grupo reducido de activistas de izquierda comenzó a atacar verbal y físicamente a personas que portaban banderas y símbolos en apoyo al presidente. Entre ellos se encontraba el youtuber Fran Fijap, quien es conocido por su canal de YouTube donde defiende abiertamente las ideas de Milei y critica al socialismo.
Testigos del incidente relataron cómo Fijap fue identificado por algunos manifestantes, quienes rápidamente lo rodearon, increpándolo por sus posturas políticas. La situación se deterioró cuando algunos de los agresores comenzaron a golpearlo, mientras otros intentaban arrebatarle sus equipos de grabación.
Fijap, quien sufrió algunas heridas y fue trasladado por una ambulancia usando un cuello ortopédico, logró escapar con ayuda de algunas personas presentes, entre ellas un repartidor de una app de pedidos que sufrió el robo de su bicicleta por parte de los maleantes.
En redes circulan varios videos, entre ellos de un trabajador de una pizzería donde se escondió Fijap escapando de los violentos que cuenta que lo quisieron matar y que no se arrepienten de haberlo ayudado, a pesar de que le destrozaron el local.
Reacciones
El ataque a Fran Fijap ha generado un fuerte repudio en redes sociales y en los medios, con personalidades del ámbito político y periodístico condenando la violencia. Desde el oficialismo, varios ministros y diputados se solidarizaron con el youtuber y condenaron la agresión, pidiendo respeto a la libertad de expresión.
Por su parte, líderes de la izquierda minimizaron el incidente, argumentando que las tensiones en las calles son producto de la creciente polarización política en el país, exacerbada por las políticas del propio Milei. Algunos sectores incluso sugirieron que las provocaciones de figuras como Fijap contribuyen a aumentar la confrontación social.
La agresión ocurrió cuando el periodista intentó hacer preguntas a manifestantes que aún permanecían cortando las calles en protesta por la ratificación del veto presidencial al financiamiento de universidades.
El conflicto por la Ley de Financiamiento Universitario ha puesto en evidencia las profundas divisiones entre el Gobierno y una parte del sector educativo. Mientras el Ejecutivo insiste en la necesidad de controlar el gasto público ante la delicada situación fiscal y financiera que experimenta el país, las universidades defienden su autonomía y exigen un financiamiento adecuado.
Uno de los puntos del conflicto es la intención del Ejecutivo de auditar los gastos de las universidades, una medida que las autoridades universitarias consideran una intromisión en su autonomía. En tanto, el gobierno lo considera necesario ya que las universidades se financian con fondos de los contribuyentes.
Desde el gobierno, aseguran que no están en contra de las universidades públicas, sino que -por el contrario- quieren hacer más eficiente su administración y recursos.