Venta de casas con usurpadores incluidos: El auge de los anuncios que revelan una crisis oculta en España
El mercado inmobiliario español enfrenta los últimos años un fenómeno creciente: la venta de viviendas ocupadas. Este hecho, lejos de ser anecdótico, refleja un problema que el Gobierno de España intenta ignorar, pero que afecta a propietarios y al mercado de la vivienda en general.
La Plataforma de Afectados por la Ocupación denuncia el incremento de anuncios de venta de casas con usurpadores dentro. «Para ser un bulo, hemos encontrado más de 70 viviendas a la venta con ‘okupas’ en Idealista solo en Gran Canaria», afirma la organización. Esta situación evidencia la desesperación de los propietarios y la impunidad con la que actúan los ‘okupas’.
Esther Pérez, responsable de redes sociales de la Plataforma y víctima de ocupación desde hace tres años, inició esta investigación. «Me dio por entrar en Idealista por curiosidad, para ver los precios de la zona. Cuál fue mi sorpresa al ver que, si seleccionas pisos en venta y ordenas por precio de menor a mayor, o más baratos por metro cuadrado, empiezas a ver ‘okupado’, ‘okupado’, ‘okupado’…», relata Pérez a Libre Mercado.
Los anuncios comparten características comunes. «Oportunidad de inversión: el inmueble se transmite ocupado», reza uno. «Inmueble ocupado, no visitable», advierte otro. Los precios son sorprendentemente bajos para las zonas en que se ubican, dirigiéndose principalmente a inversores.
La razón de estos precios bajos radica en los problemas que enfrentará el comprador. Puede tardar hasta tres años en desalojar a los okupas y comenzar a obtener rentabilidad. Además, deberá invertir en abogados y no podrá solicitar una hipoteca hasta que el inmueble esté libre de los ocupantes.
Las inmobiliarias de los bancos advierten: «El estado de ocupación y/o los impedimentos para que el inmueble pueda ser visitado libremente por los técnicos impedirían su tasación oficial conforme exige la Orden ECO/805/2003, de 27 de marzo, por lo que el inmueble, mientras perdure la situación ocupacional, no podría ser hipotecado».
El estudio de la Plataforma se extendió a Málaga, donde encontraron más de 100 anuncios similares. «Lo de Málaga es para echarse a llorar. Más de 100 publicaciones de pisos okupados en Idealista. Pero el problema de la vivienda únicamente son los pisos turísticos, ¿verdad?», cuestionan irónicamente a la ministra Isabel Rodríguez.
La mayoría de estos pisos en Málaga se ofrecen entre 30.000 y 60.000 euros, con algunos mejor ubicados alcanzando los 120.000 euros. Muchos cuentan con tres habitaciones.
Esther Pérez señala: «Los afectados estamos ya muy cansados de escuchar a líderes políticos variopintos decir que la ocupación no existe o que no es un problema. Por eso también pensamos que recopilando los anuncios se puede mostrar con datos su existencia».
Este fenómeno no se limita a zonas turísticas. Pérez encontró casos similares en Santa Pola (Alicante) y planea extender el estudio a otras regiones de España.
Los expertos advierten que la impunidad con la que operan los okupas, favorecida por el decreto antidesahucios y la Ley de Vivienda, lleva a muchos propietarios a retirar sus pisos del mercado de alquiler. Esto reduce la oferta y eleva los precios de los escasos pisos disponibles.
La situación puede convertirse en una pesadilla para compradores incautos. El caso de Leo y su marido es ilustrativo. Compraron un piso ocupado a un banco, confiando en una pronta fecha de lanzamiento. «Nos dijeron que solo sería durante dos o tres meses, así que aceptamos, pero la realidad es que hemos estado así casi tres años y medio, así que la ganga nos ha terminado arruinando la vida», lamenta Leo.
Pérez critica la normalización de esta situación: «No entiendo cómo es posible que en este país hayamos llegado a normalizar la ocupación como para poder llenar un portal de vivienda de anuncios de casas ocupadas como si fuese lo más normal del mundo». Además, le preocupa que se publicite abiertamente la situación irregular de los suministros: «Es decir, que también puedes poner por escrito que estás enganchado a la luz, por ejemplo, con el peligro que eso conlleva de incendios, y no le llama la atención a absolutamente nadie».
La Plataforma de Afectados por la Ocupación busca visibilizar este problema y cuestionar el discurso oficial que minimiza su impacto. Mientras el Gobierno señala a los pisos turísticos como principal causa de los problemas de vivienda, la realidad muestra una situación más compleja.