Vance desafía a Walz a debatir y cuestiona su historial militar en evento de campaña en Pensilvania

El candidato republicano a la vicepresidencia, JD Vance, instó el jueves a su rival demócrata Tim Walz a participar en múltiples debates de cara a las elecciones de noviembre. Durante un acto de campaña en New Kensington, Pensilvania, Vance expresó su disposición a debatir «tantas veces como sea posible».

«Tal vez soy anticuado, pero como persona que pide al pueblo estadounidense el increíble honor y responsabilidad de ser su vicepresidente, creo que debo presentarme ante ellos y exponer por qué merezco ese trabajo», declaró Vance ante una audiencia compuesta principalmente por veteranos.

El anuncio llega poco después de que ambos candidatos acordaran su primer debate para el 1 de octubre. Vance también reveló haber aceptado una invitación de CNN para debatir el 18 de septiembre, aunque según la cadena, Walz aún no ha confirmado su participación.

Vance criticó duramente a Walz y a la vicepresidente Kamala Harris por su aparente reticencia a enfrentarse a los medios. «Es vergonzoso que Tim Walz y Kamala Harris huyan de cada entrevista y de cada reportero. Se niegan a respetar al pueblo estadounidense lo suficiente como para presentarse ante ellos y pedir su voto», afirmó.

El candidato republicano, quien sirvió en el Cuerpo de Marines y fue oficial de asuntos públicos durante seis meses en Irak, cuestionó repetidamente el historial militar de Walz. Vance acusó al gobernador de Minnesota de abandonar su batallón de la Guardia Nacional justo antes de su despliegue a Irak en 2005. Walz, por su parte, sirvió en la Guardia durante 24 años antes de retirarse para postularse al Congreso.

«No atacamos su servicio honorable. Atacamos la deshonestidad sobre ese servicio», aclaró Vance, generando aplausos entre los asistentes. «Eso no es honorable. Es el colmo de la deshonra. Y Tim Walz no debería ser vicepresidente de Estados Unidos por ello».

El candidato republicano también abordó temas económicos, vinculando la inmigración ilegal con la presión sobre los salarios de los trabajadores estadounidenses. «Una de las razones por las que tenemos tanta gente sobreviviendo con empleos de salario mínimo es que Kamala Harris permite que 20 millones de inmigrantes ilegales socaven los salarios de los trabajadores estadounidenses», argumentó Vance.

En cuanto a políticas familiares, Vance abogó por promover una cultura que vea a los niños como «bendiciones y recursos, no como maldiciones». Criticó la percepción que, según él, tienen muchas empresas y líderes en Washington sobre los niños pequeños. «Me gustaría mucho que nuestras madres y padres jóvenes pudieran tener la familia que deseen sin sentir que arruinará su carrera o su futuro», expresó.

Se espera que la vicepresidenta Harris y el expresidente Trump debatan el 10 de septiembre en un evento organizado por ABC News.

Con información de Reuters