Trump visitará Carolina del Norte mientras un escándalo rodea a un aliado republicano
El candidato presidencial republicano Donald Trump no estará acompañado por el candidato de su partido para gobernador de Carolina del Norte cuando visite el crítico estado electoral el sábado, dijo la campaña de Trump.
Trump previamente apoyó a Mark Robinson, quien fue objeto de un explosivo informe de CNN esta semana en el que afirmaba que alguna vez se llamó a sí mismo un nazi negro y propuso restablecer la esclavitud en comentarios publicados en un sitio web de pornografía.
Robinson, vicegobernador del estado, negó las acusaciones y dijo que seguirá en la carrera por la gobernación.
Algunos republicanos temen que su candidatura en una de las carreras de mayor perfil del país este año pueda dañar las posibilidades de Trump en el estado clave, donde las encuestas muestran al candidato republicano esencialmente empatado con su rival demócrata Kamala Harris antes de las elecciones del 5 de noviembre.
Antes del mitin de Trump por la tarde del sábado en Wilmington, Carolina del Norte, el Comité Nacional Demócrata lanzó una nueva publicidad en las ciudades de Raleigh, Charlotte y Greensboro vinculando al expresidente con Robinson.
En marzo, Trump llamó a Robinson “Martin Luther King con esteroides” después de que este pronunciara un discurso en Greensboro. El candidato a gobernador apareció en un evento de Trump el mes pasado.
Robinson tiene un historial de retórica incendiaria y si gana se convertirá en el primer gobernador negro del estado.
Trump aún no ha hecho comentarios sobre las últimas acusaciones contra Robinson. Un asesor de Trump, que pidió no ser identificado, dijo que Trump debería guardar silencio y no avivar la controversia.
«Ignoralo y déjalo morir», apuntó el asesor.
La campaña de Harris y sus aliados han hecho una inversión significativa en Carolina del Norte, incluidas dos visitas de la vicepresidente la semana pasada. Ningún candidato presidencial demócrata ha ganado en el estado desde 2008, pero los votantes eligieron al demócrata Roy Cooper como gobernador en 2016 y 2020.
Robinson había estado siguiendo a su oponente, el demócrata Josh Stein, incluso antes del informe de CNN, lo que sugiere que podría ser un lastre para las posibilidades de Trump en el estado si algunos republicanos descontentos se quedan en casa el día de las elecciones o se unen a Harris.
Chris Cooper, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Western Carolina, dijo que en un estado en el que Trump ganó por solo 1,3 puntos porcentuales en 2020, el escándalo de Robinson podría dañar las posibilidades de los republicanos en las elecciones de noviembre, incluyendo las de Trump.
«Si algunas personas sienten que la marca republicana está lo suficientemente manchada como para que prefieran quedarse en casa, entonces eso tendrá importancia», explicó Cooper. «No hace falta una gran diferencia para cambiar el estado», añadió.
Thom Tillis, senador republicano de Carolina del Norte, respondió a las acusaciones contra Robinson diciendo a los votantes en X: “Debemos centrarnos en las carreras que podemos ganar”, citando la elección presidencial pero omitiendo la votación para gobernador.
“Si Harris gana Carolina del Norte, ganará la Casa Blanca”, escribió Tillis. “No podemos permitir que eso suceda”, aseguró.
Con información de Reuters
