Trump solicita reforzar la protección del Servicio Secreto

El jefe del Servicio Secreto dijo a Donald Trump en una reunión privada que serán necesarios nuevos e importantes arreglos de seguridad si quiere seguir jugando al golf, informó el martes The New York Times.

El lunes, Trump le preguntó a Ronald Rowe, director interino del Servicio Secreto, en una reunión si era seguro para él seguir jugando, según el periódico. Rowe dijo que el Servicio Secreto considera que el campo de golf de la Base Conjunta Andrews en Maryland es más fácil de asegurar porque es un campo militar.

Esa reunión se produjo un día después de que el Servicio Secreto frustrara un segundo intento de asesinato contra Trump en menos de dos meses. El domingo, agentes del Servicio Secreto dispararon contra Ryan Wesley Routh, el supuesto tirador, cuando vieron el cañón de su arma asomando por la valla del campo de golf de Trump en West Palm Beach, Florida, y posteriormente la policía local lo detuvo.

Trump contó que la policía detuvo a Routh exclusivamente porque una transeúnte que vio algo sospechoso le sacó fotos a él y a la camioneta en la que huyó.

El incidente ha suscitado preguntas dentro de la órbita de Trump y entre los legisladores sobre si la protección del candidato republicano es suficiente.

«El expresidente Trump está recibiendo el más alto nivel de protección que el Servicio Secreto de Estados Unidos puede brindar, y continuaremos evaluando y ajustando nuestras medidas de protección y metodología específicas en función de cada ubicación y situación», declaró el martes la portavoz del Servicio Secreto, Melissa McKenzie.

Trump le dijo el martes a Fox News: «Hemos solicitado más gente desde hace mucho tiempo». Añadió que el Servicio Secreto brindaría protección adicional.

«Creo que lo estamos consiguiendo ahora. Alguien me dijo que ahora van a proporcionar más gente», indicó el líder de movimiento MAGA al entrevistador Sean Hannity por teléfono.

Aún así, el sheriff de West Palm Beach, Ric Bradshaw, informó a los periodistas el domingo que el equipo de seguridad de Trump no era tan estricto como el de un presidente en funciones.

Desde el incidente, tanto demócratas como republicanos se han acusado mutuamente de utilizar una retórica exagerada que inspira violencia política.

La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, sostuvo en una conferencia de prensa el martes que los comentarios del candidato republicano a la vicepresidencia, JD Vance, sobre que la vicepresidente Kamala Harris no se ha enfrentado a un intento de asesinato son peligrosos.

«La gran diferencia entre conservadores y liberales es que… nadie ha intentado matar a Kamala Harris en los últimos meses», apuntó Vance el lunes.

Con información de Reuters