Trump propone el Vaticano como sede para negociaciones de Alto al Fuego entre Rusia y Ucrania

El lunes 19 de mayo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó optimismo sobre la posibilidad de negociaciones de alto al fuego entre Rusia y Ucrania, sugiriendo el Vaticano como un lugar potencial para darle «un significado adicional» a las conversaciones.
Hablando en un evento en la Casa Blanca en honor a oficiales de policía, Trump destacó el peso simbólico de Roma como sede, afirmando: «Creo que sería genial tenerlo en el Vaticano… Hay una tremenda amargura, enojo. Y pienso que tal vez eso podría ayudar a calmar algo de ese enojo.»
Los comentarios de Trump siguieron a una llamada telefónica de dos horas con el presidente ruso Vladimir Putin, durante la cual instó a poner fin al conflicto que ha persistido por más de tres años. «¿Cuándo vamos a terminar con esto, Vladimir?», relató Trump haber preguntado a Putin.
Expresó confianza en que tanto Putin como el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskiy están inclinados hacia una resolución, señalando: «Creo que Putin quiere hacerlo… Creo que ya ha tenido suficiente.» También describió a Zelenskiy como un «hombre fuerte» que, a pesar de ser «no la persona más fácil con la que tratar,» probablemente quiere detener la «cosa muy mala» que está ocurriendo en Ucrania.
El presidente reconoció la complejidad de las negociaciones, citando «egos muy, muy grandes involucrados» y la significativa carga financiera que ha asumido Estados Unidos debido a compromisos previos bajo la administración Biden. «La cantidad financiera que se ha invertido es simplemente una locura,» comentó Trump, enfatizando que Estados Unidos no tiene «botas en el terreno» pero sí tiene un interés sustancial en el conflicto.
Asimismo señaló que la situación «debería haber permanecido como un asunto europeo» pero se convirtió en una prioridad para Estados Unidos debido a decisiones políticas pasadas.
Cuando un periodista le preguntó por qué aún no ha incrementado las sanciones contra Rusia, Trump indicó una pausa estratégica, diciendo: «Creo que hay una posibilidad de lograr algo. Y si haces eso, también puedes empeorarlo.» Insinuó que tiene una «línea roja» para cuando podría desvincularse del proceso, pero declinó dar detalles, afirmando: «Sí, en mi cabeza, pero no es algo que voy a anunciar.»
Los comentarios de Trump reflejan una mezcla de optimismo y pragmatismo, basados en su autoproclamado enfoque para hacer tratos. «Toda mi vida ha sido como hacer tratos. Un gran trato,» dijo, subrayando su creencia de que la disposición de Putin para negociar es genuina. Sin embargo, reconoció la posibilidad de dar un paso atrás si el progreso se estanca, afirmando: «Si pensara que el presidente Putin no quiere terminar con esto, ni siquiera estaría hablando de ello.»
A medida que el conflicto entra en su cuarto año, el impulso de Trump por conversaciones organizadas en el Vaticano señala un esfuerzo diplomático de alto perfil para negociar la paz, aunque señaló que no se lograron grandes concesiones durante su reciente llamada con Putin. La propuesta ahora espera respuestas de Rusia y Ucrania, con la comunidad internacional observando de cerca los desarrollos.