Trump pide a la Corte Suprema que permita la reestructuración de agencias y los despidos masivos a nivel federal
El gobierno de Donald Trump pidió el lunes a la Corte Suprema de Estados Unidos que detenga una orden judicial que bloquea los recortes masivos de empleos y la reestructuración de agencias, parte de la campaña del presidente republicano para reducir y remodelar el gobierno federal.
La solicitud del Departamento de Justicia se produjo después de que la jueza federal de distrito Susan Illston, con sede en San Francisco, bloqueara los despidos federales a gran escala, conocidos como «reducciones de fuerza», en un fallo del 22 de mayo que se puso del lado de un grupo de sindicatos, grupos sin fines de lucro y gobiernos locales que desafiaron a la administración.
El caso involucra a los Departamentos de Agricultura, Comercio, Salud y Servicios Humanos, Estado, Tesoro y Asuntos de Veteranos de Estados Unidos, entre otros.
El control del personal de las agencias federales «es el núcleo» de la autoridad del poder ejecutivo del presidente, afirmó el Departamento de Justicia en la presentación.
«La Constitución no erige una presunción contra el control presidencial sobre el personal de las agencias, y el presidente no necesita un permiso especial del Congreso para ejercer los poderes básicos del Artículo II», dice el documento, refiriéndose a la sección de la constitución que delimita la autoridad presidencial.
La Corte Suprema solicitó una respuesta de los demandantes en el caso a la presentación de la administración antes del 9 de junio.
En febrero, Trump ordenó a las agencias federales «realizar rápidamente preparativos para iniciar reducciones de personal a gran escala» como parte de los planes de reestructuración de su administración.
Illston escribió en su fallo que Trump había excedido su autoridad al ordenar la reducción.
«Como demuestra la historia, el presidente puede reestructurar ampliamente las agencias federales sólo cuando lo autoriza el Congreso», escribió Illston.
El 9 de mayo, Illston había impedido inicialmente que unas 20 agencias realizaran despidos masivos durante dos semanas y ordenó la reincorporación de los trabajadores que habían perdido sus empleos. Mantuvo la mayor parte de este alivio en su fallo del 22 de mayo.
El Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito de Estados Unidos, con sede en San Francisco, en un fallo de 2 a 1 el 30 de mayo, denegó la solicitud de la administración Trump de detener el fallo del juez.
El Noveno Circuito afirmó que la administración no había demostrado que sufriría un daño irreparable si la orden del juez permanecía vigente y que era probable que los demandantes prevalecieran en su demanda.
«La orden ejecutiva en cuestión excede ampliamente los poderes de supervisión del presidente bajo la Constitución», escribió el 9.º Circuito, calificando las acciones de la administración como «un intento sin precedentes de reestructuración del gobierno federal y sus operaciones».
La administración de Trump ha buscado alivio de la Corte Suprema en un número creciente de casos luego de fallos de tribunales inferiores que obstaculizaron varias políticas desde que regresó al cargo en enero.
Reuters
