Trump nomina nuevamente al empresario y astronauta Jared Isaacman para dirigir la NASA

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este martes la nominación del empresario y astronauta privado Jared Isaacman como nuevo administrador de la NASA, cinco meses después de que su postulación original fuera retirada. La decisión busca impulsar una nueva etapa de cooperación entre el sector público y la industria espacial privada, con un enfoque en la exploración lunar, la innovación tecnológica y la expansión del llamado “mercado orbital”.

En un mensaje publicado en Truth Social, Trump destacó la trayectoria del candidato:

“Jared Isaacman ha hecho un trabajo increíble como líder empresarial, filántropo, piloto y astronauta. Su pasión por el espacio, su experiencia en vuelo y su compromiso con la exploración y la nueva economía espacial lo hacen ideal para dirigir la NASA hacia una nueva era audaz.”

La nominación deberá ser confirmada por el Senado, donde el Partido Republicano mantiene una mayoría de 53 a 47. Actualmente, la agencia espacial está bajo la dirección interina de Sean Duffy, secretario de Transporte, quien asumió el cargo tras el retiro temporal de la candidatura de Isaacman en mayo.

Un empresario con experiencia en el espacio

Isaacman, fundador del grupo de pagos Shift4 y comandante de dos misiones privadas con SpaceX, es considerado uno de los empresarios más jóvenes en alcanzar la órbita terrestre. Su colaboración con la compañía de Elon Musk en proyectos como Inspiration4 y Polaris Dawn lo posicionó como una figura clave en el auge de los vuelos espaciales comerciales.

En su cuenta de X (antes Twitter), Isaacman agradeció la confianza del presidente y expresó su compromiso con la misión de la agencia:

“Será un honor servir a mi país bajo su liderazgo. Estos son los tiempos más emocionantes desde el inicio de la era espacial, y creo sinceramente que el futuro que todos hemos estado esperando pronto será una realidad.”

El astronauta también subrayó su intención de reforzar la cooperación entre la NASA, la academia y el sector privado, asegurando que la agencia “no será una guardiana de la historia, sino una creadora de historia”.

Por su parte, Musk celebró la noticia, en un momento también donde se limaron las asperezas con el presidente Trump.

Una visión de reforma institucional y liderazgo en el espacio

Antes del anuncio oficial, Isaacman había publicado una serie de mensajes detallando su visión estratégica para la NASA. Su plan incluye cinco grandes ejes:

  1. Reorganizar y simplificar la estructura interna de la agencia, reduciendo la burocracia para agilizar la toma de decisiones.
  2. Ampliar la presencia estadounidense en el espacio, enviando más astronautas y cumpliendo el objetivo del programa Artemis de establecer una presencia permanente en la Luna.
  3. Desarrollar la economía orbital, facilitando la investigación y la inversión privada en microgravedad.
  4. Fortalecer la cooperación científica, promoviendo misiones más frecuentes y de menor costo.
  5. Invertir en formación y nuevas tecnologías, desde inteligencia artificial hasta el reemplazo de sistemas informáticos obsoletos y la creación de una “Academia Estelar” que capacite a la próxima generación de astronautas y operadores comerciales.

Isaacman enfatizó que su propuesta no implica la cancelación de programas como Gateway o el Space Launch System (SLS), sino una revisión de prioridades que permita a la agencia avanzar hacia proyectos más sostenibles y ambiciosos.

Una nominación con peso político y científico

La elección de Isaacman marca el retorno de un perfil empresarial al frente de la NASA, similar al de figuras que en el pasado impulsaron la cooperación entre el Estado y la industria tecnológica. Su nominación también refleja la intención del gobierno de Trump de reforzar el liderazgo estadounidense en la exploración espacial, un objetivo recurrente en su política científica.

De confirmarse, Isaacman asumiría la dirección de la NASA en un momento clave: la transición hacia una nueva economía espacial dominada por compañías privadas, el regreso planificado de astronautas a la Luna y el desarrollo de tecnologías que podrían definir la próxima década de exploración interplanetaria.

“El viaje nunca es fácil, pero es hora de inspirar al mundo una vez más para lograr lo casi imposible”, escribió Isaacman en su mensaje. “Cuando lo hagamos, mejoraremos la vida aquí en la Tierra y desafiaremos a la próxima generación a ir aún más lejos.”

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Redacción Mundo Libre
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