Trump «no quedó satisfecho» con la respuesta de Trudeau y exige acciones sobre el tráfico de fentanilo

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó su profundo malestar tras una llamada telefónica con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, este miércoles, según informó la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, en una conferencia de prensa.

Trump acusó a Canadá de permitir que el fentanilo, un opioide letal, cruce la frontera norte hacia territorio estadounidense, calificándolo como una amenaza mortal para los jóvenes del país.

“Canadá está permitiendo que ese fentanilo llegue a los Estados Unidos”, afirmó Leavitt, citando al mandatario, quien insistió en que “debe haber repercusiones” por esta crisis.

Durante la conferencia, la vocera destacó datos alarmantes: en el último año fiscal, las autoridades estadounidenses incautaron en la frontera con Canadá suficiente fentanilo como para matar a 4.800 millones de personas, un aumento del 2050% respecto al año 2023.

“Piensa en las vidas que se pierden. Todos en esta sala, todos los que están viendo esto en casa, conocemos a alguien que ha muerto a manos de este veneno mortal”, declaró Leavitt subrayando que el fentanilo es ahora la principal causa de muerte entre los estadounidenses de 18 a 34 años.

En una publicación en su cuenta de Truth Social el mismo miércoles, Trump afirmó que “sería muy beneficioso para el pueblo canadiense ser el estado número 51 de los Estados Unidos”. Argumentó que, de integrarse a la Unión Americana, Canadá evitaría los aranceles impuestos por Washington y disfrutaría de impuestos más bajos, una idea que resonó entre sectores conservadores que ven en la anexión una respuesta a los problemas fronterizos.

La llamada entre Trump y Trudeau, aunque terminó de “manera algo amistosa”, según la secretaria de prensa, dejó en claro la frustración del mandatario estadounidense. Leavitt explicó que Trump “no estaba satisfecho” con las respuestas del primer ministro canadiense y que le expresó directamente que su gestión “no es lo suficientemente buena” frente al tráfico de drogas.

El tema del fentanilo no es nuevo en la agenda de Trump. Durante su campaña de 2024, el entonces candidato republicano prometió endurecer las políticas fronterizas, tanto en el sur con México como en el norte con Canadá. Según datos de la Administración de Control de Drogas de EE. UU. (DEA), en 2023 se incautaron más de 379 millones de dosis letales de fentanilo en todo el país, un récord que ha alimentado el discurso de Trump sobre la necesidad de medidas drásticas.

Canadá, por su parte, ha enfrentado críticas previas por parte de funcionarios estadounidenses. Un informe del Departamento de Estado de EE. UU. de marzo de 2024 señaló que, aunque Canadá no es un productor significativo de fentanilo, su frontera permeable ha facilitado el trasiego de precursores químicos provenientes de Asia.

Las autoridades canadienses reportaron que, en 2023, decomisaron 2300 kilogramos de fentanilo en su territorio, pero la cifra palidece frente al volumen que llega a EE. UU.

La postura de Trump también apunta a México, al que acusó junto con Canadá de convertir a Estados Unidos en un “vertedero” de drogas e inmigrantes ilegales durante los últimos cuatro años. “Nuestros vecinos del norte y del sur han permitido esto”, aseguró Leavitt, haciéndose eco de las palabras del presidente.

Mientras tanto, la crisis del fentanilo sigue cobrando vidas. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), en 2023 murieron más de 74.000 personas por sobredosis relacionadas con opioides sintéticos como el fentanilo en EE. UU., una cifra que ha impulsado a Trump a mantener este tema como bandera política.