Trump negoció un alto el fuego entre Tailandia y Camboya
El viernes 12 de diciembre, el presidente estadounidense Donald Trump anunció en su plataforma Truth Social que Tailandia y Camboya habían llegado a un acuerdo de alto el fuego en la zona en disputa que rodea el templo de Preah Vihear, poniendo fin a varios días de conflicto armado. Trump afirmó que el alto el fuego se logró gracias a la mediación estadounidense.
En su declaración, Trump dijo que con el alto el fuego en vigor, los aranceles que Estados Unidos había estado considerando imponer a Tailandia y Camboya debido a la escalada de la situación quedarían en suspenso.
Un informe diplomático publicado posteriormente por la Casa Blanca reveló que Trump habló por teléfono el jueves por la noche con el primer ministro tailandés, Anutin Charnvirakul, y el primer ministro camboyano, Hun Manet, para abordar el conflicto fronterizo. Según fuentes familiarizadas con el asunto, Trump advirtió durante las llamadas que, si ambas partes no cesaban las hostilidades en un plazo establecido, Estados Unidos consideraría iniciar una investigación bajo la Sección 301 e imponer aranceles a ciertas autopartes tailandeses y textiles camboyanos.
Según el acuerdo, Tailandia y Camboya acordaron detener inmediatamente las operaciones militares en la zona fronteriza en disputa y retirar armas pesadas, incluidos tanques y artillería, a al menos 10 kilómetros de la línea del frente para crear una zona de amortiguación temporal.
Trump invita a ambos partidos a Washington
Para facilitar las negociaciones, ambas partes aceptaron una invitación estadounidense para viajar a Mar-a-Lago, Florida, la próxima semana para continuar las conversaciones. Estados Unidos afirmó que las conversaciones se centrarán en un alto el fuego a largo plazo, la seguridad fronteriza y la cooperación futura.
Un portavoz del gobierno tailandés declaró el viernes que Tailandia acogía con satisfacción el uso de la diplomacia para aliviar las tensiones y apreciaba la coordinación estadounidense. Camboya declaró que el primer ministro Hun Manet apoya la resolución de disputas mediante el diálogo y espera mantener una comunicación continua.
Los enfrentamientos previos en la frontera entre Tailandia y Camboya se saldaron con decenas de bajas militares y civiles, desplazaron a más de 50.000 residentes fronterizos y acercaron peligrosamente los combates a rutas comerciales clave. Con el anuncio del alto el fuego, los mercados financieros de Tailandia y Camboya se recuperaron en la mañana del viernes, con el baht y el riel fortaleciéndose. Las acciones de fabricantes y exportadores de productos electrónicos, previamente liquidadas por temor a sanciones comerciales, también experimentaron una fuerte recuperación.
