Trump e Infantino lanzan una «fuerza especial» para convertir a EE. UU. en la «capital del Fútbol Mundial»

El viernes 7 de marzo de 2025, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió en la Casa Blanca al presidente de la FIFA, Gianni Infantino, en un evento que marcó un hito para el fútbol mundial. Durante la reunión, Trump firmó una orden ejecutiva que establece un «Task Force de la Casa Blanca para la Copa del Mundo», un grupo de trabajo destinado a garantizar el éxito de dos grandes torneos: la Copa Mundial FIFA 2026 y la Copa Mundial de Clubes FIFA 2025, ambos con sede en Estados Unidos. Este anuncio subraya la ambición de Trump de posicionar al país como epicentro del fútbol global en los próximos años.
Trump reivindica su legado
En su discurso, Trump no dudó en atribuirse el crédito por haber asegurado la Copa Mundial 2026 durante su primer mandato, un torneo que será coorganizado por Estados Unidos, Canadá y México. «Vamos a establecer un grupo de trabajo muy importante en la Casa Blanca, y eso es para la Copa Mundial FIFA de 2026, que, como saben, es un gran evento. Creo que será el evento más grande», afirmó Trump. Añadió con orgullo: «Es la primera vez que se realiza en esta parte del mundo, y es un honor».
El presidente también hizo referencia a las tensiones comerciales con Canadá y México, sus socios en el torneo, y sorprendió al sugerir que estas disputas podrían beneficiar el evento. «Oh, creo que lo hará más emocionante. Las tensiones son algo bueno», respondió Trump a un periodista que preguntó sobre el impacto de estas fricciones en la Copa del Mundo. Con 48 equipos participantes, el torneo se extenderá del 11 de junio al 19 de julio de 2026, contará con 104 partidos (frente a los 64 de ediciones anteriores) e incluirá una ronda eliminatoria adicional.
Infantino celebra el impacto global
Por su parte, Gianni Infantino destacó la magnitud de los eventos que se avecinan. «Es un gran logro traer la Copa Mundial el próximo año, la Copa Mundial FIFA en 2026 aquí a Estados Unidos, junto con México y Canadá», señaló. Pero el foco no se limitó al 2026: Infantino también anunció la Copa Mundial de Clubes FIFA 2025, una competición nueva y ampliada que se disputará exclusivamente en Estados Unidos del 14 de junio al 13 de julio de 2025. Durante el evento, reveló el trofeo oficial de este torneo, simbolizando el inicio de una nueva era para el fútbol de clubes.
Infantino enfatizó el impacto económico y social de ambos eventos: «América dará la bienvenida al mundo. Habrá millones de personas viniendo, señor presidente, millones de personas. El impacto económico es de 40 mil millones de dólares entre ahora y el próximo año. Crearemos 200.000 empleos para estas dos Copas del Mundo. Y más que eso, daremos alegría y felicidad al mundo entero, y eso no tiene precio». El presidente de la FIFA agradeció a Trump por la creación del grupo de trabajo, que estará presidido por el propio mandatario, destacando su importancia para garantizar que los visitantes «se sientan seguros y bienvenidos».
Trump aprovechó la ocasión para reflexionar sobre el camino que lo llevó a este momento. «Cuando logramos esto, fue durante mi primer mandato. Y pensé entonces, qué triste sería si no estuviera en el cargo para verlo. Pero gané de nuevo, y aquí estamos. Así que fue algo bueno, un gran logro para ambos», comentó. Con esto, hacía referencia a su reelección en 2024, lo que le permitirá estar en la presidencia durante la Copa Mundial 2026 y los Juegos Olímpicos de 2028 en Los Ángeles, eventos en los que asegura haber desempeñado un papel clave desde su primera administración.
Estados Unidos como Capital del Fútbol
La Copa Mundial 2026 no será la primera vez que Estados Unidos albergue este torneo —ya lo hizo en 1994—, pero sí será la primera en la región norteamericana con un formato tripartito junto a Canadá y México. La edición de 2025 del Mundial de Clubes, por otro lado, posicionará al país como pionero en un torneo renovado que busca rivalizar con las ligas de clubes más prestigiosas del mundo.
Con la firma de la orden ejecutiva y el respaldo explícito de Trump, el grupo de trabajo de la Casa Blanca se encargará de coordinar la seguridad, la infraestructura y la logística para recibir a millones de visitantes. Infantino subrayó que la implicación directa del gobierno estadounidense «muestra la importancia de las Copas del Mundo de la FIFA», un mensaje que resuena tanto en el ámbito deportivo como en el político.
El anuncio de estos eventos refuerza la visión de Trump de proyectar a Estados Unidos como líder global, incluso en el deporte. Mientras Infantino y Trump posaban junto al trofeo del Mundial de Clubes, quedó claro que esta alianza busca no solo un éxito deportivo, sino también un legado económico y cultural. Con tensiones geopolíticas como telón de fondo, el fútbol podría convertirse en un inesperado catalizador de emociones y debates en los próximos años, y Estados Unidos está decidido a estar en el centro de la escena.