Trump critica la cobertura de noticias de un importante medio de comunicación
Esta semana, el presidente electo Donald J. Trump lanzó una fuerte crítica hacia The Wall Street Journal. En un mensaje publicado en redes sociales, Trump declaró:
“The Wall Street Journal se está volviendo cada vez más ofensivo e ilegible. El titular principal de hoy es: ‘El elegido de Trump para la DEA se retira en el último revés.’ Con todo lo que sucede en el mundo, este es su tema número uno del día. Además, él no se retiró, yo lo aparté porque no me gustaron sus declaraciones hacia mis pastores y otros seguidores. Pero, más importante aún, ¿cuál es mi ‘último’ revés? ¡Acabo de ganar la Presidencia de Estados Unidos! No han escrito algo positivo sobre mí en AÑOS…”.
El comentario de Trump apunta a un fenómeno que muchos observadores de los medios han señalado: la polarización entre las secciones editoriales y las de noticias de algunos medios convencionales. En el caso de The Wall Street Journal, su sección editorial ha sido históricamente más conservadora o centrista, mientras que su cobertura noticiosa ha sido percibida por algunos como alineada con una agenda progresista.
La lucha por la objetividad en los medios
La crítica de Trump a los medios de comunicación no es nueva. Según sus seguidores, gran parte de los medios convencionales han abandonado los principios de objetividad y ética periodística para convertirse en lo que ellos denominan «aparatos de propaganda» de la izquierda. Señalan que medios como ABC, CNN, The New York Times y otros han adoptado narrativas que, en su opinión, priorizan la ideología sobre los hechos, ignorando las preocupaciones de muchos estadounidenses.
Un ejemplo reciente de esta confrontación es la demanda que Trump presentó contra ABC News. La demanda, radicada el 19 de marzo en el Tribunal de Distrito del sur de Florida, acusó al presentador George Stephanopoulos de hacer comentarios malintencionados y falsos sobre Trump durante una entrevista con la representante republicana Nancy Mace. En dicha entrevista, Stephanopoulos afirmó que Trump había sido declarado «responsable de violación», una declaración que, según la demanda, fue hecha sin respeto por la verdad y distribuida ampliamente.
Como resultado del litigio, ABC News acordó pagar 15 millones de dólares a la biblioteca presidencial de Trump y publicar una declaración pública retractándose de las afirmaciones hechas durante el programa This Week el 10 de marzo de 2024. En el acuerdo, la cadena expresó:
“ABC News y George Stephanopoulos lamentan las declaraciones sobre el presidente Donald J. Trump hechas durante una entrevista con la representante Nancy Mace en This Week de ABC el 10 de marzo de 2024”.
Este caso es solo uno de los múltiples litigios que Trump ha iniciado contra medios que, según él, han dañado intencionalmente su reputación con declaraciones falsas y difamatorias.
Un presidente con estrategia mediática
Donald Trump, reconocido por su habilidad mediática, parece tener un plan claro para contrarrestar lo que considera un sesgo periodístico generalizado. Su enfoque ha incluido el uso estratégico de plataformas digitales como podcasts y redes sociales, especialmente X (anteriormente Twitter), bajo el liderazgo de Elon Musk. Durante su campaña, Trump ignoró en gran medida a los medios convencionales y optó por canales alternativos que le permitieron llegar directamente a millones de personas.
El apoyo de Musk, quien ha declarado que «el pueblo, y no tres editores de medios tradicionales, debería decidir la narrativa», ha sido clave en esta estrategia. Bajo esta alianza, Trump ha podido presentar su mensaje sin las restricciones que, según él, imponen los grandes medios.
Para los partidarios de Trump, este esfuerzo no solo redefine la relación entre la política y los medios, sino que también representa una defensa de la libertad de expresión y una resistencia al “aparato de censura” que perciben en las grandes corporaciones mediáticas.