Trump anuncia investigación contra George Soros por financiar a la extrema izquierda

El presidente Donald Trump ha anunciado que su administración iniciará una investigación contra el multimillonario financista George Soros, acusándolo de estar detrás de la financiación, entrenamiento y radicalización de jóvenes, particularmente a través de su apoyo a grupos de extrema izquierda como antifa.
Durante la entrevista, Trump sugirió que Soros y su red podrían ser investigados bajo la Ley de Organizaciones Influidas y Corruptas por Extorsión (RICO, por sus siglas en inglés), una legislación federal comúnmente utilizada contra el crimen organizado. «Vamos a investigar a Soros porque creo que es un caso RICO contra él y otras personas. Esto es más que protestas; esto es agitación real, son disturbios en las calles», afirmó Trump. El presidente insistió en que Soros financia a «agitadores profesionales» que escalan las manifestaciones a niveles de violencia.
Según el presidente, detrás de esas movilizaciones existiría un entramado bien financiado que busca desestabilizar al país, lo que justificaría la apertura de una investigación formal.
Acusaciones contra Soros y su financiamiento a Antifa
Trump ha señalado repetidamente a Soros como un objetivo, acusándolo de ser el principal financiador de movimientos de extrema izquierda, incluyendo antifa, un movimiento antifascista descentralizado conocido por sus protestas violentas contra grupos de derecha y políticas conservadoras.
Trump ha argumentado que Soros, a través de su Open Society Foundations, ha canalizado fondos hacia organizaciones que promueven la agitación y el extremismo.
La Open Society Foundations, liderada actualmente por el hijo de Soros, Alex Soros, ha ha financiado durante décadas causas progresistas, incluyendo el aborto, las fronteras abiertas y el lobby LGBT, pero ha rechazado las acusaciones de agitar protestas violentas como «falsas y absurdas», insistiendo en que su misión es promover la democracia y los derechos humanos, no la violencia.
Sin embargo, el caso de Tyler Robinson, el presunto asesino de Charlie Kirk, ha revitalizado las críticas contra Soros. Robinson, un simpatizante de antifa, fue detenido por el asesinato de Kirk, un activista conservador, y las evidencias forenses sugieren una motivación ideológica profundamente arraigada en la cultura en línea de extrema izquierda.
En una entrevista ayer con periodistas, se le preguntó a Trump si estaba preocupado por su propia seguridad. El Presidente dijo a los periodistas que «realmente no», pero «estoy realmente preocupado por nuestro país», dijo.
«Tenemos un grupo de lunáticos de la izquierda radical, absolutamente lunáticos, y vamos a resolver ese problema. Solo me preocupa el país», continuó Trump, redoblando su plan para restablecer el orden y detener a los criminales que financian la violencia de izquierda.