Trudeau y Trump se reúnen en Mar-a-Lago tras las amenazas arancelarias del presidente electo de EE. UU.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, se reunió el viernes por la noche con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, en la residencia de este último en Mar-a-Lago, Florida. Este encuentro se produjo tras la amenaza de Trump de imponer aranceles del 25% a productos canadienses y mexicanos si no se detiene el flujo de drogas y migrantes ilegales hacia Estados Unidos.
La cena, que se extendió por tres horas, abordó temas como comercio, seguridad fronteriza, la crisis del fentanilo, defensa, Ucrania, la OTAN, China y proyectos energéticos. Según una fuente anónima citada por Associated Press, la conversación fue «positiva y de amplio alcance».
A la reunión asistieron, además de Trudeau y Trump, figuras como Howard Lutnick, nominado por Trump para secretario de Comercio; Doug Burgum, gobernador de Dakota del Norte y designado para liderar el Departamento del Interior; y Mike Waltz, elegido como asesor de seguridad nacional. También estuvieron presentes David McCormick, senador electo por Pensilvania, y su esposa, Dina Powell, exasesora de seguridad nacional adjunta.
Trudeau, acompañado por el ministro de Seguridad Pública de Canadá, Dominic LeBlanc, buscó en este encuentro resolver las tensiones comerciales derivadas de las amenazas arancelarias de Trump. Antes de la reunión, Trudeau expresó su intención de abordar las preocupaciones de ambos países mediante «conversaciones constructivas» con el presidente electo.
La relación entre ambos líderes ha sido compleja. Durante su primer mandato, Trump calificó a Trudeau de «débil» y «deshonesto». Sin embargo, Canadá y Estados Unidos mantienen una de las relaciones bilaterales más estrechas del mundo. Trudeau es el primer líder del G7 en reunirse con Trump tras las elecciones del 5 de noviembre.
Las amenazas arancelarias de Trump buscan presionar a Canadá y México para que refuercen el control sobre el tráfico de drogas, especialmente fentanilo, y la migración ilegal hacia Estados Unidos. Aunque las detenciones en la frontera canadiense son significativamente menores que en la frontera con México, Trump ha insistido en la necesidad de medidas más estrictas.
Funcionarios canadienses han señalado que, de concretarse los aranceles, podrían considerar medidas de represalia. Sin embargo, aún no se han tomado decisiones al respecto. Canadá es el principal destino de exportación para 36 estados estadounidenses, con un intercambio comercial diario de bienes y servicios valorado en aproximadamente 2.700 millones de dólares estadounidenses.
La reunión en Mar-a-Lago también incluyó discusiones sobre la próxima cumbre del G7, que se celebrará en Canadá el próximo año. Ambos líderes destacaron la importancia de la cooperación en temas globales y regionales, subrayando la necesidad de fortalecer la alianza entre sus naciones.
Al finalizar el encuentro, Trudeau se mostró optimista respecto a la resolución de las diferencias comerciales y enfatizó la importancia de mantener un diálogo abierto y constructivo con la administración entrante de Estados Unidos. Por su parte, Trump no emitió declaraciones públicas inmediatas sobre la reunión.