A 50 días del accidente: Por qué los tripulantes del buque que destruyó el puente de Baltimore aún no pueden desembarcar
Los tripulantes del carguero que impactó con el puente de Baltimore, provocando el colapso de la estructura, aún no han podido desembarcar pese a que han pasado 50 días desde el incidente.
Fue la madrugada del 26 de marzo cuando el buque Dali colisionó con el puente Francis Scott Key, desatando el derrumbe de parte importante de la enorme construcción.
En total, ocho personas que trabajaban en el puente cayeron al río Patapsco, de las cuales dos pudieron ser rescatadas, una en estado grave. Sin embargo, los otros seis finalmente murieron.
A poco más de siete semanas del accidente, los tripulantes del barco aún no han podido desembarcar. Peor aún, desde entonces tienen problemas para comunicarse con sus familias, las que viven a miles de kilómetros, ya que ni siquiera cuentan con sus teléfonos celulares.
Así lo afirma la cadena británica BBC que en un artículo detalla por qué la tripulación compuesta por 20 indios y un ciudadano de Sri Lanka no pueden salir de la embarcación.
Específicamente, se trata de una combinación de factores que han llevado a las autoridades norteamericanas a impedirles que desembarquen, entre ellos, restricciones de visa y la falta de pases terrestres exigidos para su desembarque.
No obstante, a esto se suma otro importante detalle: las investigaciones paralelas que llevan a cabo la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) y el FBI.
Joshua Messick, director ejecutivo de la ONG Centro Internacional de Marinos de Baltimore, detalló que los funcionarios del FBI confiscaron los móviles de los tripulantes para ser periciados, dejándolos incomunicados por un par de semanas.
“No pueden hacer operaciones bancarias en línea, no pueden pagar sus cuentas en casa. No tienen ninguno de sus datos ni la información de contacto de nadie, por lo que en este momento están realmente aislados”, señaló Messick.
“Simplemente no pueden comunicarse con las personas que necesitan, ni siquiera ver fotos de sus hijos antes de dormir”, agregó, aseverando que es una “situación realmente triste”.
Posteriormente, a los tripulantes se les entregaron celulares temporales con tarjetas SIM pero sin datos incluidos. A su vez, han recibido paquetes de ayuda gestionados por grupos comunitarios.
Messick cree que pronto los marineros podrían optar a pases de tierra para que puedan conocer algo de la ciudad mientras dura la investigación, aunque con importantes medidas de restricción.
Una posibilidad es que salgan en grupos de cinco con una escolta durante su estadía en tierra. “Estoy tratando de descubrir qué quiere hacer el equipo. No quiero llevarlos a un juego de béisbol si se van a aburrir”, mencionó Messick.
“Así que me comuniqué con un club de cricket local para ver si podían organizar un partido”, agregó, aludiendo al deporte más popular en India.
Recordemos que a fines de marzo los investigadores determinaron que el barco transportaba 56 contenedores con materiales químicos peligrosos, algunos de los cuales cayeron al agua tras el impacto.
Jennifer Homendy, presidenta de la NTSB, estimó que en los contenedores había 764 toneladas de elementos corrosivos e inflamables, como baterías de iones de litio.
Cabe señalar que se han realizado explosiones controladas para así ir retirando las partes de la estructura que mantienen al carguero varado bajo un enorme montón de metal.
Fuente: BioBio Chile