«Dios puede perdonar a todos, pero eso le compete a Dios»: Bukele defiende la ‘mano dura’ contra las pandillas
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, continuó este martes su visita oficial a Argentina, donde fue recibido en el Congreso por la vicepresidente y presidente del Senado, Victoria Villarruel, y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. Durante el encuentro, Bukele compartió su experiencia en la lucha contra las pandillas y el narcotráfico, discutió el potencial del Bitcoin como moneda para la economía local, y destacó que el éxito de cualquier iniciativa depende de contar con el apoyo de “todos los actores del país detrás del plan”.
En su visita al senado el 1 de octubre, Bukele defendió la línea dura de su gobierno para acabar con la violencia de las pandillas.
“Soy creyente y Dios puede perdonar a todos, pero eso le compete a Dios. Aquí, en la tierra, no; tenemos que dejarlos en prisión y funcionó para sacar a criminales y quitar el incentivo a los jóvenes”, dijo el mandatario.
“Éramos el país más peligroso del mundo, más que Siria e Irak”. Y agregó: “Teníamos 103 homicidios cada 100.000 habitantes. Haití tiene 50 hoy en día, era casi el doble”.
El presidente argentino, Javier Milei, recibió a su homólogo salvadoreño en Buenos Aires para discutir temas de comercio, seguridad y energía nuclear el lunes (30 de septiembre).
El gobierno argentino ha expresado afinidad con el plan de lucha contra el crimen que Bukele puso en marcha durante su primer mandato.
Las políticas de seguridad del gobierno de Bukele han recibido el crédito de reducir la criminalidad, pero también han sido criticadas por algunos grupos de derechos humanos. Sobre estas acusaciones, Bukele ha declarado que esas organizaciones defienden los derechos humanos de los delincuentes y no de las personas honradas.
Cierre de la visita
El martes culminó la visita oficial del mandatario salvadoreño y así como fue recibido con honores, del mismo modo al irse fue homenajeado por el Regimiento de Granaderos a Caballo.
Creado por José de San Martín el 16 de marzo de 1812, el regimiento de Granaderos a Caballo se disolvió doce años después, al concluir la Campaña Libertadora. A principios de este siglo, el Tte. Gral. Ricchieri, ministro de Guerra de Julio A. Roca, volvió a instituirlo, a fin de «conservar en el Ejército de la Nación la representación de uno de sus Cuerpos más beneméritos».