«Si perdemos a la familia como unidad básica de la sociedad, estamos condenados a una muerte lenta», alerta académico polaco

Candela Sol Silva, columnista de Mundo Libre Diario, habló con Jerzy Kwasniewski, presidente de Ordo Iuris, Instituto Polaco de Cultura Jurídica, en el marco de la CPAC celebrada en Hungría.

¿Qué actividades realiza el Instituto Ordo Iuris?

El Instituto fue fundado hace 11 años como un think tank conservador, compuesto principalmente por abogados en ejercicio y académicos del ámbito jurídico, representantes de la doctrina legal. El Instituto Ordo Iuris se estructura en dos pilares: el primero es el litigio, es decir, la asistencia legal en casos precedentes. Y el segundo pilar es la pericia, el análisis académico y la investigación. Publicamos informes, libros y también revistas jurídicas. Todo esto al servicio de la vida, la familia, la libertad y la soberanía de nuestro estado. Operamos tanto a nivel nacional como internacional: en Polonia, en Varsovia y otras ciudades. Y también en Estados Unidos, la Unión Europea, las Naciones Unidas, el Consejo de Europa, entre otros.

¿Qué opina sobre la situación actual de las familias europeas?

Estamos experimentando una crisis muy importante de la familia en Europa. Nuestra identidad tradicional, los valores cristianos y las civilizaciones occidentales se construyeron sobre lo que se describe en la Declaración Universal de Derechos Humanos: la unión familiar como unidad básica de la sociedad. Mientras que bajo la influencia de la ideología de género y la revolución sexual, la familia misma se ha convertido, de hecho, en muchos países, en un enemigo del estado. Un enemigo de las grandes ideologías que perciben la familia como un lugar fundacional para la violencia contra las mujeres, la violencia contra los niños, la reproducción de esquemas patriarcales de la sociedad que se culpan de cada patología en la sociedad. Y tenemos que oponernos a eso. Porque si perdemos nuestra familia como valor, como la unidad básica y apreciada de la sociedad, entonces estamos condenados a una muerte lenta de nuestras sociedades y de nuestra civilización. Eso es también el objetivo del derecho mismo, del derecho constitucional, del sistema internacional de derechos humanos, proporcionar protección a la familia que defiende a sus miembros contra el estado, pero también que permite que los niños y los adultos prosperen en la familia misma.

¿Cuál es la importancia de los valores cristianos en la familia?

Los valores cristianos, la identidad cristiana, formaron la familia moderna. Formaron una familia moderna que se basa en el matrimonio de un hombre y una mujer. Eso es algo que necesitamos agregar en el siglo XXI. Que se basa en una unión estable de socios iguales que forman juntos la familia. Igual no significa que sean lo mismo, sino que, de hecho, se apoyan mutuamente en el cumplimiento de sus obligaciones hacia la familia, hacia ellos mismos. Y la familia abierta a la vida, la familia abierta a los hijos, hijos numerosos, y la familia abierta a cumplir con sus obligaciones hacia la sociedad y la nación, es decir, transmitir la tradición. La tradición significa identidad, identidad nacional, identidad cristiana, desde las generaciones de nuestros antepasados hasta las generaciones de nuestros hijos y nietos. Ese es el papel de la familia. Y eso es lo que el derecho mismo debería proteger para proteger a nuestras naciones y nuestra historia de éxito de la civilización occidental. Porque la civilización occidental es mayormente una historia de éxito de 2000 años de desarrollo, de 2000 años de desarrollo científico, desarrollo filosófico, de una mejor situación de las familias.

¿Por qué cree que las familias europeas no están teniendo hijos?

Porque perdieron su identidad. Perdieron su capacidad de percibir el autosacrificio como una virtud. Perdieron esta capacidad de percibir el autosacrificio como algo que debería ser apreciado, premiado y apoyado por la comunidad. Y también perdieron este sentimiento natural para la civilización occidental que son parte de una comunidad. No están atomizados como sociedad. Son parte de la comunidad familiar. Son parte de la comunidad parroquial. Son parte de la comunidad local y nacional. Tienen sus obligaciones, no solo derechos, sino también obligaciones hacia la comunidad. Una de esas obligaciones es formar una familia, tener hijos, criar a los hijos en la identidad, la identidad cristiana de la nación misma. Y como todas las virtudes, debería ser una fuente de felicidad. Porque en la civilización occidental, nuestro sistema educativo debería apuntar a formar a los niños y adultos que sean felices con el autosacrificio, que entiendan que están haciendo algo bueno. Toda la sociedad los protege y los apoya en esta misión.

¿Cree que las familias polacas son más conscientes que las familias de Europa Occidental?

Europa Central es más consciente que Europa Occidental. En Polonia, en Hungría, Rumanía, Bulgaria, todavía son mucho más cristianas, mucho más tradicionales que nuestros homólogos de Europa Occidental, las familias de Alemania, Francia o incluso España. Sin embargo, los mismos procesos que en Occidente ocurrieron, están ocurriendo ahora en nuestros países. También es una oportunidad para ver los resultados finales de los procesos que destruyeron a las familias en Francia o Alemania. Podemos gritar a nuestras comunidades, podemos gritar a nuestras naciones, ¿a dónde conduce esto? No conduce a un estado feliz de una nación exitosa. Podemos ver las consecuencias. Y es muy importante porque en nuestra misión de movilizar a las personas contra esos procesos, hacerles conscientes de que necesitan autosacrificarse, para producir nuestros valores de la civilización occidental, los valores cristianos.

¿Cuál es la situación política en Polonia?

La situación política es muy difícil. Nuestra misión como Ordo Iuris, no somos un partido político, somos independientes. Hemos empujado a nuestro gobierno conservador a posiciones conservadoras todo el tiempo. Aunque no estamos muy contentos con todo lo que hicieron, sabemos que el gobierno anterior (Ley y Justicia) era conservador, eran cristianos.

En diciembre de 2023, un nuevo gobierno progresista tomó el poder. En los primeros tres meses del nuevo gobierno, se introdujeron políticas radicales de izquierda. Se está introduciendo la educación sexual en las escuelas. La ley del aborto se está presentando en el parlamento. Nuestro gobierno abre negociaciones en la Unión Europea para reorganizar los tratados de la Unión Europea con el fin de intercambiar nuestra soberanía por dinero. Y nuestro ejército incluso, por dinero de Bruselas. Lo que está sucediendo ahora es un proceso acelerado de transición progresista apoyado por el gobierno que necesita ser detenido y retenido por un movimiento popular de organizaciones cívicas, de la Iglesia, de la Iglesia Católica y de los partidos políticos que se unan a nosotros. Y eso es lo que estamos haciendo ahora mismo. Estamos movilizando a las personas contra este cambio progresista.

¿Cree que en las próximas elecciones europeas podría haber un auge conservador?

Absolutamente. El 9 de junio, las elecciones europeas mostrarán un aumento del apoyo al movimiento conservador en toda Europa. Principalmente a los partidos soberanistas en toda Europa. Sin embargo, es una pregunta abierta si esos movimientos conservadores, movimientos soberanistas, serán lo suficientemente fuertes para influir en la Comisión Europea después de las elecciones. O si todavía habrá una gran coalición entre los llamados Demócratas Cristianos Europeos y los Socialistas Comunistas.

Por Candela Sol Silva para Mundo Libre Diario