Crisis de natalidad en China: el régimen comunista insta a las mujeres a encabezar una «nueva tendencia familiar»

A medida que China continúa lidiando con una disminución en los nacimientos y un creciente envejecimiento de la población, el presidente Xi Jinping afirmó el 30 de octubre que las mujeres deberían tomar la iniciativa para ayudar a configurar una «nueva tendencia familiar». A pesar de que la población global superó los 8 mil millones el año pasado, China, el país más poblado del mundo, ha experimentado una caída en su tasa de natalidad en los últimos años.

Los comentarios de Xi se dieron a conocer en una publicación de la agencia estatal Xinhua, después de un discurso con el nuevo liderazgo de la Federación de Mujeres de China, que opera dentro del marco del gobernante Partido Comunista Chino (PCCh). Xi expresó que «abordar las preocupaciones de las mujeres» no solo es beneficioso para su crecimiento individual, sino que también está vinculado a la «armonía familiar, la armonía social, el desarrollo nacional y el progreso nacional».

Hizo hincapié en la urgencia de «cultivar activamente una nueva cultura de matrimonio y crianza de hijos y fortalecer la orientación sobre la visión de matrimonio, crianza de hijos y familia de los jóvenes».

El 31 de octubre, los datos de la Oficina Nacional de Estadísticas de China revelaron que la tasa de fertilidad del país había caído a un mínimo sin precedentes de 1,09 el año pasado. Del mismo modo, los datos oficiales de 2021 indican que la población de China aumentó en apenas 480,000 personas, alcanzando un total de 1,4126 mil millones.

Ahora, mientras las autoridades se apresuran a revertir la crisis, los demógrafos han advertido que una «disminución nacional parece inevitable», a medida que la población de ancianos del país continúa creciendo mientras las generaciones más jóvenes siguen siendo reacias a tener hijos o formar familias numerosas.

La reticencia de las mujeres jóvenes chinas a formar familias puede atribuirse a múltiples factores, que van desde los costos prohibitivos del cuidado infantil, posibles obstáculos en sus carreras, prejuicios de género prevalentes hasta un menor interés en el matrimonio. También es importante destacar que las cifras de nacimientos en China están intrínsecamente vinculadas a las estadísticas de matrimonio, principalmente porque las políticas actuales presentan desafíos para las mujeres solteras que desean tener hijos.

«Según mi propia investigación, lo que he observado es que las mujeres a menudo se resisten y a menudo priorizan su empleo remunerado y sus ideales individualistas sobre esta incentivación sostenida», dijo Yun Zhou, profesora asistente de sociología en la Universidad de Michigan, a NPR News.

Sin embargo, el Anuario Estadístico de China sugiere que la caída en picado de la tasa de natalidad podría tener repercusiones profundas en la economía del país. Además de lidiar con las tensiones económicas de extensos confinamientos por COVID-19, que han detenido las operaciones industriales y obligado al cierre de negocios, China también enfrenta turbulencias en sus sectores bancario y de bienes raíces.

«La era del crecimiento rápido, del crecimiento de dos dígitos, de la mano de obra barata, de una fuerza laboral más joven, esa era ahora está realmente llegando a su fin», dijo Stuart Gietel-Basten, profesor de ciencias sociales en la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hong Kong, así como en la Universidad Khalifa, en Abu Dhabi.

Una carrera contra el tiempo Para contrarrestar la caída de los números, las autoridades chinas han introducido una gran cantidad de medidas en el pasado reciente, que incluyen incentivos financieros, bonificaciones y un impulso en la infraestructura de cuidado infantil.

De las 31 regiones provinciales de China, 13 registraron más defunciones que nacimientos en 2021. Esta lista incluye importantes centros financieros y de comercio como Shanghai, Jiangsu y Tianjin. También en esta lista se encuentran las regiones agrícolas de Sichuan, Chongqing, Hunan y Hubei, junto con Hebei, Shanxi, Mongolia Interior y las provincias del noreste de Liaoning, Jilin y Heilongjiang.

En la provincia septentrional de Heilongjiang, solo hubo 3.59 nacimientos por cada 1,000 personas en 2021, marcando la tasa más baja en cualquier jurisdicción. Mientras tanto, con 8.7 defunciones por cada 1,000 personas, la región también tuvo una de las tasas de mortalidad más altas del país.

Los datos oficiales revelaron que la población de China aumentó en apenas 480,000 personas a 1,4126 mil millones el año pasado, representando el menor crecimiento desde 1962 y un fuerte contraste con el aumento de 2.04 millones en 2020. Estas cifras indican el menor número de nuevos nacimientos desde que comenzaron los registros modernos en 1949. Además, las disminuciones en al menos seis jurisdicciones contribuyeron a que la tasa de natalidad nacional de China descendiera a 7.52 por cada 1,000 personas en 2021.

Mientras tanto, los medios afiliados al estado han establecido consistentemente conexiones entre el crecimiento de la población y los temas generales de «fortaleza y rejuvenecimiento» de la nación.

Por Alina Wang – Vision Times