¿Quién es el responsable del conflicto entre Hamás e Israel?

Eliminar a terroristas como Hamás es un paso necesario para abordar la cuestión de los refugiados palestinos, trabajar por la creación de un Estado palestino y facilitar las negociaciones de paz entre Palestina e Israel.

El repentino ataque de Hamás contra Israel causó importantes víctimas civiles, y las represalias militares de Israel también causaron víctimas civiles. El mundo está dividido en este asunto, unos apoyan a Israel y otros a Palestina. ¿Qué argumento es más razonable?

Los que apoyan a Palestina destacan principalmente dos puntos: en primer lugar, los refugiados palestinos no tienen país y son muy desafortunados; en segundo lugar, en comparación con Israel, Palestina es la parte más débil, y debemos simpatizar con la parte más débil. Es un hecho que los palestinos no tienen país y que los refugiados palestinos se encuentran en una situación lamentable. Pero la pregunta es: ¿quién es responsable de esta situación? ¿Es todo responsabilidad de Israel?

En cuanto a la cuestión del conflicto entre Israel y Palestina, es necesario respetar la historia y afrontar la realidad para lograr justicia y equidad.

Rodeados por todas partes

Los palestinos no tienen Estado, y los israelíes también pasaron miles de años sin Estado, vagando por todas partes. Los registros históricos indican que más de mil años antes de Cristo, los israelíes ya vivían en ese pedazo de tierra de Oriente Próximo, que es la patria del pueblo judío. Sin embargo, debido a la ocupación del antiguo Imperio Romano y al posterior dominio imperial otomano, el levantamiento judío fue reprimido, lo que provocó el desplazamiento y asentamiento de judíos por todo el mundo.

El establecimiento y la demarcación de muchos países del mundo actual se determinaron tras el final de la Segunda Guerra Mundial. Antes de eso, hubo muchas fluctuaciones y no existía una historia de quién era parte integrante de quién. En 1922, la zona de Oriente Próximo que hoy es Israel, Jordania y la Franja de Gaza estaba bajo el mandato de la precursora de las Naciones Unidas, la Sociedad de Naciones, autorizada por el Reino Unido.

Tras la Segunda Guerra Mundial, se crearon las Naciones Unidas y el mandato británico llegó a su fin. En noviembre de 1947, la ONU aprobó una resolución para establecer dos Estados en Oriente Medio: el Estado de Israel y el Estado de Palestina. En aquel momento, la ONU solo llevaba dos años establecida y contaba con poco más de 50 miembros. La «Resolución 181» fue aprobada con 33 votos a favor (que representaban el 58% de los miembros de las Naciones Unidas), 13 votos en contra y 10 abstenciones.

Una vez aprobada la resolución, el pueblo judío estableció el Estado de Israel el 14 de mayo de 1948, tras seis meses de preparativos. Dos años después, ingresaron en la ONU. Sin embargo, los palestinos no establecieron su propio Estado.

Quienes hoy condenan y acusan a Israel de impedir que los palestinos establezcan un Estado deben enfrentarse primero a una pregunta: cuando la ONU ya había aprobado una resolución acordando el establecimiento de un Estado palestino, ¿por qué no lo crearon? Los palestinos no cumplieron con su responsabilidad de construir su propio país, así que ¿cómo se puede culpar a Israel? Por lo tanto, la condena de Israel a este respecto está totalmente injustificada.

Tanto Israel como Palestina fueron autorizados por las Naciones Unidas a establecer sus propios países. Israel estableció su propio país, mientras que Palestina no lo hizo. Esto es enteramente responsabilidad de los intelectuales y políticos palestinos, resultado de su negligencia e incompetencia, y no tiene nada que ver con Israel.

El segundo día de la fundación de Israel, éste fue invadido por cinco países árabes vecinos: Egipto, Siria, Jordania, Irak y Líbano, así como grupos guerrilleros palestinos. En lugar de construir su propio Estado, centraron sus esfuerzos en oponerse violentamente a la existencia de Israel. 

En aquella época, Israel carecía de ejército regular; apenas había transcurrido el segundo día desde su creación y solo contaba con una fuerza miliciana de unos 30.000 efectivos. Sin embargo, el pueblo de Israel se unió contra sus enemigos comunes. Judíos de todo el mundo regresaron a su patria y pusieron todo su empeño en resistir la invasión. Al final, prevalecieron y garantizaron la supervivencia de Israel.

Ocupación de tierras en Israel y Palestina

¿Por qué cinco países árabes se armaron para invadir el recién creado Israel? Aparte de no querer la existencia judía en Oriente Medio, había otros motivos detrás: pretendían apoderarse de la tierra que las Naciones Unidas habían designado para el establecimiento de Israel. Cuando estos intentos fracasaron, se repartieron y ocuparon todo el territorio designado por las Naciones Unidas para la creación de un Estado palestino: Egipto ocupó la Franja de Gaza y Jordania ocupó Cisjordania, que eran los principales territorios que la ONU había acordado que formarían parte de Palestina.

El problema de los refugiados palestinos se remonta a la primera guerra de Oriente Próximo, cuando cinco países árabes invadieron conjuntamente Israel, lo que provocó la creación de 700.000 refugiados. Los palestinos se quedaron sin hogar, dispersos en lugares como la Franja de Gaza ocupada por Egipto y Cisjordania ocupada por Jordania.

Cuando hoy se habla de los refugiados palestinos y se expresa simpatía por estas personas sin hogar, la primera pregunta que cabe hacerse es: ¿quién provocó esta situación? La respuesta es clara.

Como es bien sabido, muchos países de Oriente Próximo son increíblemente ricos debido a sus reservas de petróleo; están sentados esencialmente sobre una mina de oro. Si estos países árabes (la Liga Árabe cuenta con 22 Estados miembros) acogieran y aceptaran a los refugiados palestinos, la situación del pueblo palestino no sería tan grave. Sin embargo, hasta ahora, todos estos países árabes se han negado a aceptar a los refugiados, obligando a muchos de ellos a viajar largas distancias hasta Europa. Por lo tanto, cuando estos países árabes ahora se quejan en voz alta de la difícil situación de los refugiados palestinos, es totalmente hipócrita, ya que con sólo un poco de esfuerzo, podrían mejorar sus condiciones de vida.

Por lo tanto, la cuestión de los refugiados es una cuestión de países árabes fundamentalistas que se oponen a la existencia de un Estado en Oriente Medio que fue aprobado por una resolución de la ONU, a saber, Israel.

Erradicar el terrorismo y garantizar la paz

En la primera guerra de Oriente Próximo de 1948, una coalición de cinco países árabes intentó invadir Israel, pero fracasó. En 1967, tras 19 años de planificación y preparación, volvieron a intentar una invasión conjunta. El equilibrio de poder era muy desigual, e Israel no podía permitirse esperar, por lo que decidió atacar preventivamente, lo que resultó en otra victoria contra cinco naciones árabes. Israel mantuvo su ventaja, ocupando la península egipcia del Sinaí y capturando los estratégicos «Altos del Golán» que Siria utilizaba para atacar a Israel. Sin embargo, solo diez días después de la guerra, el gabinete israelí aprobó una resolución para «intercambiar tierra por paz».

Israel estaba dispuesto a devolver los territorios ocupados siempre que las naciones árabes circundantes reconocieran la existencia de Israel y se abstuvieran de empujar al pueblo judío al mar. Más tarde, Egipto reconoció a Israel, estableció relaciones diplomáticas y recibió la devolución de la península del Sinaí. Siria, en cambio, sigue sin reconocer a Israel, y los Altos del Golán siguen sin ser devueltos.

El mismo principio se aplica a la Franja de Gaza. Ya en 1994, Israel entregó el 80% del territorio de Gaza a la administración palestina y retiró totalmente sus fuerzas en 2005, incluidos los residentes israelíes que habían vivido allí durante muchos años, reubicándolos dentro de Israel. Toda Gaza fue devuelta a los palestinos. Sin embargo, Hamás convirtió Gaza en una base militar para lanzar ataques contra Israel.

En los tres años siguientes a la retirada israelí, Hamás disparó más de 6.000 cohetes contra territorio israelí, causando numerosas víctimas civiles. Por tanto, las verdaderas razones de los pasados conflictos de Oriente Medio, el conflicto palestino-israelí y los recientes ataques de Hamás contra Israel, son también las cuestiones clave.

Hoy en día, todos los que apoyan al pueblo palestino deberían apoyar también a Israel, porque mientras Hamás mata indiscriminadamente a civiles israelíes, ellos utilizan al pueblo palestino como escudo, despreciando el bienestar de su propio pueblo. Solo eliminando a estos terroristas como Hamás e impidiendo que sigan perjudicando a su propio pueblo puede existir la posibilidad de abordar la cuestión de los refugiados palestinos, la cuestión del Estado palestino y, en última instancia, lograr la paz entre Palestina e Israel mediante negociaciones.


Por: Cao Changqing

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Redacción Mundo Libre
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