Quién es Nigel Farage, el político que podría ser la sorpresa en las elecciones del Reino Unido

Lo ame o lo odie, es difícil acusar a Nigel Farage de ser aburrido o predecible.

Farage, de 60 años, que ayudó a defender la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, había dicho previamente que no se presentaría a la votación del 4 de julio para ayudar a Donald Trump a luchar en las elecciones estadounidenses de finales de año. Luego dijo que había cambiado de opinión y que se presentaría como candidato en las elecciones del 4 de julio, liderando el Partido Reformista de derecha, en un duro golpe para el primer ministro Rishi Sunak.

Farage dijo sentirse culpable por no dar la cara por la gente que se había desilusionado con la política y siempre le había apoyado.

Según el sistema electoral británico, el Reformismo no podría ganar estas elecciones, había dicho el propio Farage. Pero dice que su partido puede surgir como la principal oposición al gobierno de centro-izquierda del Partido Laborista, al que las encuestas pronostican una mayoría aplastante.

Aunque Farage se ha presentado sin éxito siete veces al Parlamento, sigue siendo uno de los políticos británicos más influyentes de su generación, presionando a una sucesión de primeros ministros para que adopten posturas más duras sobre la UE y la lucha contra la inmigración.

Rechazado por el establishment político británico y respaldado por financieros euroescépticos, ayudó a respaldar el Brexit por millones de votantes de Inglaterra y Gales que se sentían ignorados por los principales partidos conservador y laborista.

Farage es un antiguo financiero. Pero décadas de arremeter contra el establishment le han cosechado la confianza de partidarios que dicen sentir que otros políticos les hablan con desprecio.

Cultivando una imagen de patriota británico amante de los pubs, Farage pasó más de 20 años como diputado electo al Parlamento Europeo mientras abogaba por su abolición. Pero aunque su partido logró ganar escaños en las elecciones europeas celebradas bajo el sistema de representación proporcional, nunca consiguió un escaño propio en el Parlamento del Reino Unido, bajo un sistema de mayoría relativa que exige ganar el mayor número de votos en una circunscripción.

En los últimos años ha trabajado en la televisión estadounidense como comentarista pro-Trump.

El anterior partido político de Farage, el Partido por la Independencia del Reino Unido, pro-Brexit, cosechó su primer éxito en la localidad costera de Clacton, al este de Inglaterra, cuando en 2014 un legislador conservador se pasó a sus filas y defendió con éxito el escaño hasta 2017.

Con el Reino Unido fuera de la Unión Europea, el nuevo mantra de Farage es que «Gran Bretaña está rota», un mensaje que resuena entre los votantes que culpan al partido gobernante de unos años turbulentos y económicamente dolorosos.

(Reuters)