Purgas en el régimen chino: expulsan a dos generales de alto rango por corrupción, ¿señal de debilidad?

En una reunión presidida por Xi Jinping el 27 de junio, el Politburó del Partido Comunista Chino (PCCh) anunció el calendario de una conferencia de liderazgo largamente esperada, así como la expulsión de dos ex ministros de Defensa del Partido por corrupción. 

Los dos generales de cuatro estrellas del Ejército Popular de Liberación (EPL), Wei Fenghe y Li Shangfu, fueron despojados de sus rangos. Las investigaciones de las autoridades disciplinarias del PCCh sobre sus crímenes comenzaron a fines de 2023, informó el portavoz estatal Xinhua. 

Xinhua describió los crímenes de Wei y Li de la siguiente manera: “extremadamente graves, el impacto fue extremadamente atroz y el daño fue particularmente inmenso”.

SinoInsider, una consultora de riesgos especializada en la política de élite china, señaló en un artículo publicado el 27 de junio en X que “la destitución de Wei y Li de esta manera sugiere que Xi Jinping todavía está luchando contra la corrupción masiva en el EPL. Esto, a su vez, pone en duda la capacidad del EPL para invadir Taiwán o llevar a cabo otros actos de agresión grave en el corto plazo”.

Mientras tanto, el PCCh celebrará la Tercera Sesión Plenaria del XX Comité Central del 15 al 18 de julio. 

Durante las últimas décadas, los comités centrales del PCCh han cumplido mandatos de cinco años; el Tercer Pleno se utiliza normalmente para discutir y anunciar las políticas económicas chinas. 

‘Territorio de aguas profundas’ 

Sin embargo, la celebración del Tercer Pleno del XX Comité Central se retrasó casi un año respecto de su cronograma normal, algo que SinoInsider cree que ocurrió debido a los problemas políticos que enfrenta el liderazgo de Xi. 

Además de la sombría situación económica de China, que hace que sea incómodo celebrar la reunión en el intervalo habitual, la purga de varios funcionarios de alto rango por corrupción que eran vistos como aliados de Xi a partir de mediados de 2023 probablemente dejó al líder «indeciso sobre cómo proceder en espera del resultado de las investigaciones de corrupción«, además de enfrentarse a «la clara falta de consenso dentro del Partido en medio de la agitación política», escribió SinoInsider en un análisis del 1 de julio.

Los observadores de China consideraban que tanto Li Shangfu como Wei Fenghe estaban del lado de Xi. Li fue destituido abruptamente de su cargo como ministro de Defensa chino el año pasado, tras la desaparición y posterior destitución de Qin Gang, el ministro de Asuntos Exteriores promovido por Xi. 

“Creemos que la purga de Xi de sus aliados y leales en el ejército presagia un movimiento para consolidar aún más el poder en el Tercer Pleno”, escribió SinoInsider en X, “y llevar varias reformas y rectificaciones al llamado ‘territorio de aguas profundas’”.

Además de purgar a Wei, Li y otros por corrupción grave que socava la capacidad del EPL de servir como una fuerza de combate efectiva, el hecho de que Xi estuviera dispuesto a perseguir a sus propios aliados podría sugerir que está preparando movimientos más grandes contra sus enemigos en el Partido Comunista. 

Yuan Hongbing, un disidente y jurista chino radicado en Australia con contactos internos en el establishment del PCCh, dijo anteriormente a Vision Times que, según sus fuentes, el liderazgo de Xi ha estado dividido sobre cómo manejar el legado político de Jiang Zemin, el exjefe del Partido cuya era de influencia se extendió desde fines de la década de 1990 hasta el ascenso de Xi al poder en 2012. 

Xi Jinping espera denunciar abiertamente el legado político de Jiang, dijo Yuan, pero las opiniones sobre esto entre los otros seis miembros del Comité Permanente del Politburó del PCCh —el máximo órgano de liderazgo— son mixtas. 

Tal medida fortalecería la autoridad personal de Xi en el PCCh. Sin embargo, criticar a un ex líder cuya facción conserva influencia hasta el día de hoy también podría desestabilizar gravemente el régimen, según el análisis de SinoInsider.