Por qué es importante meditar: 6 razones para empezar a meditar hoy mismo

La meditación puede ser la herramienta más subestimada para promover la salud y el bienestar. Sin necesidad de equipo especial ni formación costosa, esta antigua práctica, ampliamente adoptada en círculos espirituales, es fácilmente accesible para todos. Casi en cualquier lugar y en cualquier momento, puedes sentarte y disfrutar de una sorprendente variedad de beneficios con respaldo científico. 

Estrés reducido 

La razón más común para meditar es la reducción del estrés, que, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), está relacionado con aproximadamente el 90 % de las enfermedades. En el mundo acelerado de hoy, con agendas apretadas y sobrecarga de información, los niveles de estrés se disparan y olvidamos cómo relajarnos. 

Desconectarse frente al televisor puede darle a su cuerpo un descanso, pero la intensa estimulación visual continúa exigiendo al cerebro, manteniéndolo ocupado recopilando información. 

La mente humana necesita periodos regulares de descanso para procesar información, generar ideas y almacenar recuerdos para dar cabida a nueva información. Todo esto ocurre en el «estado alfa», cuando la mente está relajada, por ejemplo, al hacer ejercicio ligero, al acostarse o al sentarse a meditar. Si bien todas estas técnicas pueden ayudar a reducir el estrés inmediato, la meditación puede ofrecer beneficios a largo plazo.

Cerrar los ojos durante la meditación no solo relaja los músculos y órganos; estudios de la Universidad de Harvard revelan que la práctica continua reduce gradualmente el tamaño de la amígdala cerebral (el área responsable de la respuesta al estrés). Esto modifica y mejora nuestra reacción ante los desencadenantes del estrés.  

Sueño mejorado

Al igual que nuestro cerebro, nuestro cuerpo necesita periodos de descanso para renovarse y rejuvenecerse. Durante el sueño se producen importantes respuestas curativas e inmunitarias; sin embargo, muchos estadounidenses (alrededor del 33 % de los adultos y el 46 % de los adultos jóvenes) no duermen lo suficiente. Ya sea que estemos dando vueltas en la cama preocupados o trasnochando bajo presión, el estrés es un factor importante en la pérdida de sueño. 

Al reducir el estrés, la meditación puede mejorar el sueño de forma natural; pero va más allá. Un estudio que comparó los efectos de la educación del sueño y la meditación en dos grupos de personas demostró que quienes participaron en meditación de atención plena experimentaron una mayor reducción del insomnio, la fatiga y la depresión después de seis semanas de una sola sesión semanal. 

Los meditadores experimentados pueden incluso experimentar una menor necesidad de sueño. Los niveles elevados de melatonina y serotonina presentes en meditadores de larga duración pueden mejorar significativamente la calidad del sueño, logrando así todos los objetivos necesarios en menos tiempo. 

Mejora de la salud física

Con un mejor sueño y menos estrés, uno esperaría naturalmente algunos beneficios para la salud física de la meditación, y pueden ser considerables. 

• Las investigaciones científicas han revelado un aumento de la actividad de las células asesinas naturales con la meditación, fortaleciendo la inmunidad y la resistencia contra ataques virales y cáncer. 
• La meditación envía señales al cerebro para disminuir el ritmo cardíaco, reducir las hormonas del estrés y relajar el sistema nervioso, no sólo calmando el cuerpo sino potencialmente reduciendo la presión arterial y mejorando la salud cardiovascular .
• Al mejorar el sueño gracias a la meditación regular, los niveles de energía se estabilizan. Esto puede contribuir a una sensación de bienestar que facilita mantener un estilo de vida saludable. 
• Los estudios demuestran que la meditación también puede ayudar a controlar el dolor al modificar la percepción del mismo. Las personas que padecen afecciones como artritis, fibromialgia y migrañas pueden experimentar una reducción del dolor crónico. 

Equilibrio emocional mejorado

La meditación regular puede ayudar a reconocer, regular y expresar las emociones de forma sana y equilibrada. El equilibrio emocional facilita la transición de reacciones ineficaces e impulsivas a respuestas tranquilas y reflexivas. 

Al reducir el nivel de hormonas del estrés, la meditación también puede reducir los síntomas de ansiedad y depresión. Estudios han demostrado que la meditación consciente puede ser igual o más efectiva que los antidepresivos. 

La meditación va un paso más allá, fomentando una mentalidad positiva. A medida que el estrés y la ansiedad se disipan, la gratitud, la compasión y el perdón toman su lugar, brindándote una perspectiva optimista de la vida. 

Claridad mental

Durante miles de años, los monjes han buscado la claridad y la iluminación mediante la meditación. ¿Puede la meditación hacer lo mismo por ti? Investigadores de las Universidades de Harvard y Columbia descubrieron que la meditación puede mejorar la capacidad de atención, la concentración, el enfoque y la memoria al influir en la estructura y la función cerebral. 

Con la meditación regular, la corteza prefrontal (responsable de la atención, la toma de decisiones y la resolución de problemas) se vuelve más gruesa, fortaleciendo la capacidad de concentrarse y mantener la concentración durante períodos más prolongados. 

Al mismo tiempo, se fortalece la conexión entre la red neuronal por defecto (RND) (responsable de la divagación mental y los pensamientos aleatorios) y la corteza prefrontal. Esto ayuda a reducir la divagación mental y mejora aún más la concentración. 

La meditación también activa el hipocampo (asociado con la flexibilidad cognitiva, el aprendizaje y la memoria), para mejorar funciones cognitivas como la capacidad de aprendizaje y la retención. 

Al mejorar la claridad mental, la meditación puede ayudarnos a ser más creativos, productivos y presentes en nuestra vida diaria. 

Relaciones fortalecidas

Finalmente, una práctica constante de meditación puede ayudar a fortalecer y armonizar todas tus relaciones. A medida que nos volvemos más conscientes de nuestros pensamientos y emociones, nos comprendemos mejor y comenzamos a desprendernos de hábitos y tendencias negativas: un gran paso hacia una relación tan importante con nosotros mismos. 

Cuando nos volvemos más comprensivos y nos aceptamos mejor, esto se extiende naturalmente a los demás. Nos convertimos en personas más tranquilas, más afectuosas y más racionales, con quienes es mucho más fácil llevarse bien; y cuando permitimos que los demás sean quienes son sin juzgarlos ni proyectar nuestras expectativas artificiales sobre ellos, se sentirán seguros para abrirse y construir una relación más sólida. 

Consejos para una meditación exitosa

Quizás hayas considerado la meditación, pero no sabes por dónde empezar. Estos consejos te ayudarán a empezar:

• Encuentra un entorno tranquilo y ordenado que prometa pocas distracciones.
• Elige un horario que te resulte conveniente de forma regular.
• La música relajante o los sonidos de la naturaleza pueden ayudar a la relajación y reducir las distracciones.
• Empieza poco a poco, con solo cinco o diez minutos para no desanimarte. Ve aumentando el tiempo poco a poco. 
• Siéntate en silencio, experimenta la quietud y observa tus pensamientos y sentimientos con una mente abierta. 
• Esfuérzate por ser constante. Aunque te saltes algunos días, perdónate y continúa. Con el tiempo, la práctica se convertirá en una herramienta poderosa para transformar tu vida. 

Por Ila Bonczek