Lucha contra las pandillas: Congreso de El Salvador aprobó una segunda ampliación del régimen de excepción
Con el fin de extender la emergencia de la llamada «lucha contra las pandillas», la Asamblea Legislativa de El Salvador aprobó este miércoles 25 de mayo una segunda extensión de un régimen de excepción implementado desde el pasado 27 marzo.
El régimen de excepción se amplía por un período de 30 días, es decir hasta finales de junio. El decreto fue aprobado a solicitud del presidente Nayib Bukele con los votos de 67 diputados, de los 84 que forman el Congreso.
Diputados del partido oficialista Nuevas Ideas (NI) señalaron que si bien ha sido controlada la ola de violencia que dio pie a implementar el estado de excepción, el “génesis” de las pandillas “no ha acabado”, por lo que es necesario que el régimen continúe para que “el Gobierno termine por completo con las pandillas”.
Asimismo señalaron que durante el régimen “no ha habido violación de derechos”, sino “justicia para las familias, víctimas de las pandillas”.
Según las autoridades policiales, bajo el régimen de excepción se han detenido a más de 34.500 pandilleros y terroristas, muchos de ellos correspondientes a la temida banda criminal Mara Salvatrucha, también conocida como MS-13.
La oposición ha criticado que no se puede recurrir a esta medida por un problema de delincuencia común. También la medida ha sido criticada por algunas organizaciones internacionales.
La parlamentaria Claudia Ortiz, del partido opositor Vamos, señaló que bajo el régimen de excepción “se están violentando derechos de personas inocentes” y que “hay personas muriendo en manos del Estado”.
Además, pidió al Gobierno que explique “por qué no pueden combatir la delincuencia sin régimen de excepción”.
A pesar de las críticas internacionales y de la oposición, el pueblo salvadoreño parece estar a favor de las medidas implementadas por Bukele. Una nueva encuesta publicada ayer indica que 8 de cada 10 ciudadanos coincide en que la delincuencia ha disminuido desde que prevalece el régimen de emergencia o excepción.
Las redadas en este operativo especial comenzaron luego de un sangriento fin de semana en el que se registraron 87 homicidios, lo que llevó al gobierno a decretar un régimen de excepción el domingo 27 de marzo, con el fin de frenar el «incremento desmedido» de las muertes atribuidas a las pandillas.
A la medianoche del lunes 26 de abril, venció el primer estado de excepción y luego se prorrogó por 30 días más, hasta esta nueva instancia en que se volvió a extender.
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El régimen de excepción supone la suspensión de algunas garantías constitucionales y se puede aplicar «en casos de guerra, invasión del territorio, rebelión, sedición, catástrofe, epidemia u otra calamidad general o de graves perturbaciones del orden público».