«No hay que agitar el fantasma»: Javier Milei descartó un posible default

Este jueves 5 de octubre, el candidato a la presidencia de Argentina y favorito en las encuestas, Javier Milei, desembarcó en Mar del Plata para asistir a una reunión con un gran grupo de empresarios en un restaurante.

Paralelamente, al lado, en el Hotel Sheraton, se estaba realizando el coloquio de IDEA, un instituto empresarial que organiza todos los años una cumbre en Mar del Plata. Milei decidió no participar en este evento y eligió asistir a una reunión pautada hace 4 meses.

En la puerta del restaurante, antes de la reunión, un gran grupo de periodistas lo abordaron para hacerle preguntas. Uno de ellos le preguntó por qué no había asistido al evento de IDEA.

“Tenía pautada esta reunión hace cuatro meses. Pero además, también puedo elegir no ir a un lugar donde no me tratan bien”, respondió.

Respecto al pago de la deuda externa y a la posibilidad de default, Milei fue categórico y dijo:

“Vamos a pagar la deuda y vamos a respetar los derechos de propiedad. Es muy irresponsable agitar el fantasma del default. No se puede agitar el caos en una situación tan delicada como la que vivimos”.

En caso de ganar las elecciones y asumir como Presidente el próximo 10 de diciembre, Milei aseveró que “los argentinos de bien vamos a estar mucho mejor”. “Los que van a estar mal son los chorros y los corruptos”, disparó y dijo que “tiene un programa para salir de la miseria y poner en pie a la Argentina”. “Eso le voy a contar a los empresarios ahora”, agregó y ratificó que eliminar el Banco Central es una política inamovible.

Ante la consulta de quién será su Ministro de Economía en caso de asumir la Presidencia, el libertario dijo que lo tiene definido, pero que no lo va a decir porque “lo operan y lo ensucian”.

Recortes

Al responder una pregunta de una periodista local sobre dónde aplicaría la «motosierra», es decir, en qué sectores del estado realizaría recortes presupuestarios, el líder libertario respondió: «Proponemos aplicarla [la motosierra] en las partidas donde roban los políticos. También en la obra pública, porque vamos a pasar a un sistema de obras privadas. Otra partida que se puede recortar son la de las transferencias de Nación a las Provincias y otra cosa es la eliminación de los subsidios. Todo esto incluye la eliminación de los regímenes jubilatorio de privilegio y la eliminación del déficit de las empresas públicas, que deben ser privatizadas o entregadas a los trabajadores».