Musk y Milei: de la risa por «hijos de cuatro patas» a la seria discusión sobre la caída de la tasa de natalidad
En una reciente reunión en Estados Unidos, el presidente argentino, Javier Milei, y el empresario Elon Musk sostuvieron una conversación que, aunque inició con un tono humorístico, derivó en un debate sobre la demografía mundial.
En una entrevista con el podcaster Lex Fridman, Milei, conocido por su estilo directo, brindó detalles de una de sus reuniones con Elon Musk.
El economista de 53 años expresó su admiración por Musk, a quien calificó como un «héroe de la historia de la humanidad» debido a su «lucha por la libertad» y su «impacto en la sociedad global».
Para sorpresa del líder libertario, durante el encuentro, el dueño de Tesla abordó el tema del crecimiento poblacional. «Me planteó un tema de demografía y empezamos a discutir demografía y crecimiento. Jamás me imaginé que con un hombre de negocios iba a estar discutiendo temas de demografía y crecimiento», relató Milei.
El dueño de SpaceX y la red social X ha manifestado en diversas ocasiones su preocupación por la baja tasa de natalidad afirmando que es una de las mayores amenazas para la civilización. «Si la gente no tiene más hijos, la civilización se va a desmoronar», ha apuntado. Esta mirada es compartida por Milei.
Sin embargo, mientras el empresario de origen sudafricano tiene 12 hijos, el presidente argentino no tiene ninguno. Por eso, recuerda Milei, Musk le dijo: «Bueno, dado que compartimos la misma visión sobre las cuestiones demográficas, que hay que poblar el planeta… ¿Usted, cuándo va a avanzar en esto?».
Milei, en tono jocoso, respondió que ya tenía «cinco hijos», refiriéndose a sus perros. Musk, siguiendo la broma, replicó: «Mire, los de cuatro patas no cuentan», lo que provocó risas entre ambos.
Este intercambio refleja las serias preocupaciones de Musk sobre la disminución de la natalidad. Ha advertido que «uno de los mayores riesgos para la civilización es la baja tasa de natalidad y el rápido descenso de la misma». Según datos del Banco Mundial, la tasa de natalidad mundial ha estado disminuyendo desde la década de 1960.
En contraste, organismos internacionales como las Naciones Unidas y el Foro Económico Mundial resaltan que es necesario controlar la natalidad ya que los recursos escasean. Producto de esta visión es que promueven el aborto, la eutanasia y la llamada «diversidad sexual».
Lo cierto es que la tasa de natalidad está cayendo de manera alarmante, sobre todo en países desarrollados, que son precisamente quienes han aplicado con mayor rigurosidad las políticas de estos organismos globalistas.
En el caso de Estados Unidos, por ejemplo, la tasa de natalidad hay caído por debajo de los niveles de la de reemplazo. Mientras que en 2001 se estimaban 2,1 hijos por mujer, el último censo, realizado en 2022, determinó que esa variable se retrotrajera a 1,4 hijos.
Asimismo, los países en desarrollo también registraron descensos, como el caso de la India que superó a China como el país más poblado del mundo, a pesar de que su tasa de natalidad ya se encuentra por debajo del nivel de reemplazo.