Musk asiste a mitin de Trump en Pensilvania, en el lugar del intento de asesinato de julio

Elon Musk dijo el jueves por la noche que asistirá al mitin de Donald Trump en Butler, Pensilvania, a finales de esta semana, un evento que marcará el regreso del expresidente estadounidense a la ciudad donde sobrevivió a un intento de asesinato en julio.

«¡Estaré allí para apoyarlo!», respondió Musk a una publicación de Trump en la plataforma de redes sociales X diciendo que regresaría a Butler el sábado.

Musk, director ejecutivo de Tesla y propietario de X, calificó de «duro» al candidato presidencial republicano Trump y lo apoyó oficialmente después de que sobrevivió a un intento de asesinato en Butler el 13 de julio, consolidando su giro hacia la política de derecha.

El mitin del 5 de octubre se llevará a cabo en el mismo terreno donde Trump recibió el roce de una bala en la oreja derecha y donde un asistente al mitin murió cuando un hombre armado abrió fuego. El pistolero, identificado como Thomas Crooks, de 20 años, fue asesinado a tiros por un francotirador del Servicio Secreto.

En septiembre, el expresidente sobrevivió a otro intento de asesinato cuando un hombre armado se escondió sin ser detectado durante casi 12 horas en un campo de golf de uno de sus clubes de Florida.

Kamala Harris, demócrata, se enfrentará a Trump el 5 de noviembre en lo que las encuestas muestran como una carrera presidencial reñida.

«Voy a volver a Butler»

«Voy a volver a Butler porque siento que tengo la obligación de volver a Butler», dijo Trump a la cadena de noticias por cable NewsNation a principios de esta semana. «Nunca terminamos lo que se suponía que debíamos hacer».

Trump también estará acompañado en el mitin por su compañero de fórmula para vicepresidente, el senador JD Vance, y la familia del bombero Corey Comperatore, quien recibió un disparo fatal durante el intento de asesinato de Trump.

Otro asistente a la manifestación de julio, Shane Chesher, de 37 años, dijo que regresaría el sábado para lo que espera que sea un evento emotivo.

Chesher dijo que presenció el intento de asesinato desde un asiento en el escenario detrás de Trump y que todavía está procesando lo que sucedió.

«Sinceramente, no sé si aún hoy entiendo lo que vivimos ese día», dijo Chesher en una entrevista.

Regresar al lugar, dijo, «será espiritual y creo que será muy emotivo, bueno y malo».

El tiroteo de Butler provocó críticas generalizadas al Servicio Secreto de Estados Unidos y la dimisión de su director.

Los críticos expresaron su preocupación sobre cómo el sospechoso de 20 años, Thomas Matthew Crooks, quien posteriormente fue asesinado a tiros por agentes del Servicio Secreto, pudo acceder a una azotea cercana con una línea de visión directa hacia donde Trump estaba hablando.

Una investigación del Servicio Secreto encontró fallas en la comunicación y falta de diligencia antes del tiroteo. Después de la investigación, la agencia aprobó medidas de seguridad adicionales para Trump, incluido el uso de vidrios a prueba de balas para protegerlo en los mítines al aire libre.

El portavoz del Servicio Secreto, Anthony Guglielmi, dijo en una declaración antes de la manifestación del sábado que había habido «cambios y mejoras integrales en nuestras capacidades de comunicación, recursos y operaciones de protección».

Trump atribuye el mérito de haberle salvado la vida al girar la cabeza para leer un gráfico en un vídeo de gran tamaño. Con la sangre goteando por su rostro, levantó un puño y gritó «lucha» a sus seguidores, una imagen vívida de ese día. Durante días después del tiroteo, llevó una venda blanca en la oreja herida.