Milei apunta al kirchnerismo por crisis en el Hospital Garrahan: “Los ñoquis filtran los recursos a gente que no trabaja”

El presidente de Argentina, Javier Milei, acusó al kirchnerismo de ser el responsable del conflicto laboral que atraviesa el Hospital Garrahan, uno de los centros pediátricos más prestigiosos del país.
En una entrevista concedida el 30 de mayo al canal de streaming Neura, Milei afirmó que “empleados administrativos dibujados por el kirchnerismo” están filtrando recursos esenciales que deberían destinarse a los profesionales de la salud y a la atención de los pacientes.
“Esta es la trampa que han generado los psicópatas kirchneristas: inventan curros en lugares sensibles y cuando uno va y desactiva el curro, lo acusan de insensible”, declaró el mandatario, en referencia a las protestas de médicos y trabajadores por mejoras salariales.
El conflicto en el Hospital Garrahan, que realiza cerca de 600.000 consultas ambulatorias, 100 trasplantes y 10.000 cirugías anuales, escaló en los últimos días con el anuncio de un paro de 48 horas por parte de los médicos residentes, quienes reclaman una recomposición salarial del 100% y que ningún sueldo esté por debajo de la canasta básica.
Según los trabajadores, un médico residente cobra alrededor de $700.000 (USD 596), mientras que una enfermera percibe aproximadamente $620.000 (USD 528). Estas cifras son consideradas insuficientes frente a la inflación. El Ministerio de Trabajo dictó el 30 de mayo una conciliación obligatoria por 15 días para frenar las medidas de fuerza, exigiendo a las partes retrotraer la situación al estado previo al conflicto.
Milei aseguró que su gestión ha destinado al Garrahan un presupuesto récord en 2024, que según el Ministerio de Salud aumentó un 244%, pasando de $48.000 millones (USD 41 millones) a $165.000 millones (USD 140 millones).
Sin embargo, desde el gobierno libertario sostienen que el problema radica en un “desorden administrativo” dentro del hospital.
La viceministra de Salud, Cecilia Loccisano, señaló el 29 de mayo a través de la red social X que “es un escándalo que haya 953 burócratas en el Garrahan y solo 478 médicos de planta”, y afirmó que los sueldos administrativos superan el presupuesto destinado al cuerpo médico.
Estas declaraciones refuerzan la postura de Milei, quien insistió en que “los ñoquis que le filtran los recursos a gente que no trabaja” son un lastre heredado de administraciones anteriores.
La respuesta de los trabajadores del Garrahan no se hizo esperar. Según un informe interno del hospital citado por Infobae el 30 de mayo, el 70% del personal es asistencial, incluyendo no solo médicos, sino también 1.300 enfermeros, bioquímicos, farmacéuticos y técnicos en áreas como esterilización.
Alejandro Lipcovich, secretario general de la Junta Interna de ATE, explicó que los 478 médicos de planta mencionados por el gobierno no incluyen a residentes ni becarios, que sumarían unos 700 profesionales más. “En la conducción tenés al jefe de sala o coordinador de servicio. Eso figura en conducción, pero en su mayoría son médicos”, aclaró Lipcovich en diálogo con Infobae.
La expresidente Cristina Fernández de Kirchner salió al cruce de las declaraciones de Milei. El 30 de mayo, a través de su cuenta de X, publicó un video de 2 minutos y 43 segundos titulado “¡Ay Milei! ¿Con los niños enfermos también?”, donde se muestran testimonios de trabajadores y familias afectadas por el conflicto.
Fernández de Kirchner criticó la postura del gobierno, insinuando que las medidas afectan a los pacientes pediátricos más vulnerables. Este intercambio refleja la polarización política en torno al conflicto, que Milei calificó como una situación “politizada” por el kirchnerismo.
El gobierno sostiene que está trabajando para resolver la crisis. El subsecretario de Prensa, Javier Lanari, afirmó el 29 de mayo en X que a partir del lunes 2 de junio se implementará un sistema biométrico para “depurar los cientos de ñoquis administrativos” que, según el oficialismo, fueron puestos por el kirchnerismo.
Además, trascendió en la prensa argentina que el gobierno estaría evaluando un aumento salarial para destrabar el conflicto, aunque esta información aún no ha sido confirmada oficialmente por el Ministerio de Salud ni por la Presidencia.
El Hospital Garrahan, financiado en un 80% por el gobierno nacional y en un 20% por la Ciudad de Buenos Aires desde 2017, es un pilar en la atención pediátrica de Argentina. Sin embargo, las tensiones entre los trabajadores y la gestión libertaria han puesto en evidencia las dificultades para equilibrar la eficiencia administrativa con las demandas salariales. La viceministra Loccisano insistió el 30 de mayo que “están los recursos” para llegar a un acuerdo, pero pidió a los residentes suspender las medidas de fuerza por 48 horas para avanzar en las negociaciones.
Milei comparó la situación del Garrahan con la reestructuración que llevó a cabo en el Ministerio de Capital Humano, liderado por Sandra Pettovello. “Cuando desarticulamos a los gerentes de la pobreza, decían que éramos insensibles, pero duplicamos la AUH y la Tarjeta Alimentar, y al quitar intermediarios, los recursos se multiplicaron por cuatro”, afirmó en Neura. Según el presidente, las críticas forman parte de un “relato mentiroso de los kukas” que busca desacreditar las reformas de su gobierno.