Los Obama se sumarán a Kamala Harris en el tramo final de la campaña

La candidata presidencial demócrata Kamala Harris hará campaña por primera vez con Barack y Michelle Obama en eventos separados la próxima semana, con la esperanza de inyectar algo de poder estelar político en la carrera final hacia el día de las elecciones en noviembre, dijo un alto funcionario de campaña.

El expresidente y su esposa siguen siendo inmensamente populares entre la base demócrata y se espera que sean efectivos para cerrar el tramo final de una campaña que depende de la participación de los demócratas leales en estados donde los márgenes de victoria son estrechos.

Las encuestas muestran que la carrera presidencial entre Harris y su rival republicano Donald Trump sigue siendo extremadamente reñida.

Michelle Obama se prepara para hacer campaña por primera vez en este ciclo electoral, y aparecerá con Harris el sábado 26 de octubre en Michigan. El discurso sin tapujos que pronunció la ex primera dama en la Convención Nacional Demócrata en Chicago a principios de este año acusó a Trump de infundir miedo para llegar al poder.

Barack Obama tiene previsto hacer campaña con Harris el próximo jueves en Georgia. Ha estado recorriendo los estados en disputa, con un acto en solitario recientemente en Pittsburgh y hará más en los próximos días en Tucson, Las Vegas, Detroit y Madison.

Barack Obama recibió críticas después de su primera aparición de campaña, donde reprendió a algunos hombres negros por no «sentir la idea de tener a una mujer como presidente».

Los críticos dijeron que su tono amenazaba con convertir en chivos expiatorios a algunos de los partidarios más confiables del Partido Demócrata, alejando a votantes que pueden haberse desilusionado pero que aún son persuadibles.

Harris fue una de las primeras en apoyar la candidatura presidencial de Barack Obama en 2008.

Algunos consideran que el expresidente ayudó a sacar al presidente Joe Biden de la carrera después de que las preocupaciones de los demócratas sobre la edad y las capacidades del líder de 81 años se dispararan después de su debate de junio contra Trump.

Reuters