«Los hijos no son un negocio»: Giorgia Meloni ratifica su postura hacia el alquiler de vientres
La líder italiana y primera ministra, Giorgia Meloni, destacó recientemente los logros de su gobierno en el último año, anunciando medidas como «desalojos inmediatos» de propiedades ocupadas ilegalmente y la inminente consideración de la gestación subrogada como un delito «internacionalmente punible» en Italia, enfatizando que «los hijos no son un negocio».
En una declaración anterior, Meloni expresó: «No creo que comerciar con el cuerpo femenino y transformar la maternidad en un negocio pueda considerarse una conquista de la civilización. El alquiler del útero es la esclavitud del tercer milenio».
La gestación subrogada ya está prohibida en Italia, sin embargo, la novedad radica en que, a través de la modificación del artículo 12 de la Ley n.40 del 19 de febrero de 2004, el gobierno italiano pretende penalizar también a aquellos que busquen en el extranjero la obtención de un hijo gestado por otra mujer, ya sea a través de prácticas altruistas o mediante compensación económica.
«Atreju»
Durante su intervención, que abarcó aproximadamente 70 minutos en el emblemático evento «Atreju» de su formación política, Meloni reafirmó la determinación del gobierno de derechas que lidera, asegurando que llevará a Italia «con la cabeza alta, los zapatos llenos de barro y las manos limpias».
La primera mujer en ocupar la posición de primera ministra en Italia describió las próximas elecciones al Parlamento Europeo como una «cita memorable con la historia» y aprovechó la ocasión para criticar las «elucubraciones tácticas» de la prensa sobre las posibles coaliciones en Bruselas y su potencial impacto en la estabilidad de Roma.
La relevancia de este evento se acentúa debido a la diversidad de grupos europeos a los que pertenecen los partidos en el gobierno: Meloni al Grupo de los Conservadores y Reformistas (ECR), la Liga de Matteo Salvini al Partido Identidad y Democracia (ID), y Forza Italia al Partido Popular Europeo (PPE).
«Atreju», celebrado a los pies del Castel Sant’Angelo de Roma durante cuatro días, se consolida como un evento representativo de la ideología de la derecha italiana, atrayendo a prominentes figuras políticas y empresariales tanto nacionales como internacionales.
La festividad contó con la participación del primer ministro británico, Rishi Sunak, a quien Meloni acogió como «un amigo», junto con el líder de VOX, Santiago Abascal, y el magnate Elon Musk.
Este último apareció sobre el escenario con uno de sus hijos en sus hombros y recomendó tener hijos para garantizar la futura generación y denunciar la caída demográfica en países occidentales como Italia.