Los aspirantes de visa H-1B enfrentan mayor escrutinio en redes sociales ante la nueva política estadounidense

Una nueva ronda de medidas de escrutinio de EE. UU. para los solicitantes de visas H-1B entró en vigor oficialmente el lunes 15 de diciembre. Según las últimas regulaciones del Departamento de Estado de EE. UU., todos los solicitantes de visas de trabajadores altamente calificados H-1B y sus familiares acompañantes H-4 ahora estarán sujetos a una revisión ampliada de las redes sociales y enfrentarán revisiones más estrictas de sus actividades en línea.
La detección en redes sociales se ha ampliado significativamente
El Departamento de Estado de EE. UU. declaró que este ajuste de política añade un nivel adicional de supervisión al proceso de revisión de visas existente. Para determinar la elegibilidad, los funcionarios consulares examinarán las publicaciones, las conexiones sociales y la información relacionada de los solicitantes en cuentas de redes sociales de acceso público.
Según la nueva norma, todos los solicitantes deben enviar los nombres de usuario de todas las cuentas de redes sociales actuales y anteriores que hayan utilizado en los últimos cinco años y asegurarse de que estas cuentas sean accesibles públicamente para su revisión.
Este cambio amplía el sistema de revisión de redes sociales que se aplicaba anteriormente a estudiantes internacionales y visitantes de intercambio. Anteriormente, los solicitantes de visas de no inmigrante F, M y J ya estaban sujetos a revisiones similares en redes sociales. Con la inclusión formal de las visas H-1B y H-4 en el mismo marco, Estados Unidos ha estandarizado aún más sus criterios de revisión de visas.
La visa H-1B se ha considerado durante mucho tiempo una de las principales vías para que talento extranjero altamente cualificado ingrese a EE. UU., mientras que las visas F, M y J involucran a más de 1,5 millones de estudiantes internacionales y académicos visitantes anualmente. Por lo tanto, la nueva normativa tendrá un impacto tangible en una parte significativa de la fuerza laboral de los sectores tecnológico, médico y académico estadounidense.
La H-1B es una de las pocas visas de no inmigrantes de EE. UU. que permite “doble intención”, lo que significa que los solicitantes pueden solicitar legalmente la residencia permanente mientras poseen una visa temporal.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que durante la entrevista de visa, los solicitantes deben centrarse exclusivamente en su propósito actual y claro (el empleo en sí) en lugar de en sus planes de inmigración futuros.

Contexto político: una supervisión más estricta de la inmigración
El gobierno de Estados Unidos describe este ajuste como parte de los esfuerzos para fortalecer la seguridad nacional, enfatizando el uso de “toda la información disponible” para identificar a individuos considerados no elegibles para ingresar o que puedan representar un riesgo potencial para la seguridad de los Estados Unidos.
La implementación de esta política coincide con un período de endurecimiento general de la política migratoria estadounidense que comenzó durante la administración Trump.
Los cambios recientes en las políticas incluyen un escrutinio más intenso de los titulares de visas, un aumento en las revocaciones de visas y nuevas acciones de cumplimiento dirigidas a los empleadores acusados de desplazar a los trabajadores domésticos estadounidenses.
A nivel federal, esta directiva se alinea con tendencias políticas más amplias. El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) ha comenzado a recopilar identificadores de redes sociales de todos los solicitantes de visa y ciudadanía. Mientras tanto, una nueva política del Departamento de Seguridad Nacional considera el contenido antisemita un factor negativo en las decisiones sobre visas o inmigración.
Además, las actualizaciones de los sistemas administrativos han promovido el intercambio de datos y la colaboración entre agencias, como el “Proyecto Firewall” del Departamento de Trabajo, cuyo objetivo es fortalecer los procesos de cumplimiento y revisión.

Opiniones oficiales y de expertos divergentes
El Departamento de Estado de EE. UU. enfatizó: «Cada adjudicación de visa es una decisión de seguridad nacional. Estados Unidos debe mantenerse alerta en el proceso de emisión de visas para garantizar que quienes soliciten ingresar al país no tengan la intención de perjudicar al pueblo estadounidense ni los intereses nacionales, y que todos los solicitantes puedan demostrar de manera creíble que cumplen con los requisitos de elegibilidad para la visa, incluyendo que sus actividades planeadas se ajusten a las condiciones de entrada. Una visa estadounidense es un privilegio, no un derecho».
Sin embargo, la política ha generado controversia. Los críticos argumentan que un mayor escrutinio de las redes sociales y la libertad de expresión en línea podría tener un efecto inhibidor sobre la libertad de expresión, alargar los plazos de tramitación administrativa y crear barreras para las empresas y universidades estadounidenses que buscan talento clave.
Stuart Anderson, director ejecutivo de la Fundación Nacional para la Política Estadounidense, dijo a Newsweek que la visa H-1B es vital para Estados Unidos: “Las visas H-1B son a menudo la única vía para que Estados Unidos emplee talento extranjero altamente calificado a largo plazo, y en campos clave de ciencia y tecnología en las universidades estadounidenses, aproximadamente el 70 por ciento de los estudiantes de posgrado a tiempo completo son internacionales”.
Los partidarios argumentan que, en medio de una mayor aplicación de las leyes migratorias y una revisión de la seguridad nacional, la medida ayuda a salvaguardar la seguridad de Estados Unidos y los intereses nacionales.
El Departamento de Estado de EE. UU. recuerda a los solicitantes de visa, especialmente a los solicitantes H-1B y H-4, que se preparen para tiempos de procesamiento más largos y se aseguren de que su actividad en línea coincida con la información proporcionada en sus solicitudes de visa.
También se recomienda a los empleadores estadounidenses que contraten empleados con visa H-1B que evalúen con anticipación los posibles impactos, incluidos los retrasos en el regreso de los empleados debido al procesamiento extendido, y que se aseguren de que sus prácticas de empleo cumplan con las regulaciones laborales y de inmigración en evolución.
Por Gao Yun








