López Obrador rechaza comentarios de EEUU sobre protesta contra su reforma electoral
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, acusó este martes al Departamento de Estado de Estados Unidos de inmiscuirse en sus asuntos tras comentarios de funcionarios sobre las protestas en la Ciudad de México contra una reforma electoral promovida por el oficialismo.
Decenas de miles de mexicanos salieron a las calles el domingo para protestar contra las medidas impulsadas por López Obrador para reducir el presupuesto diezmar a la autoridad electoral del país, en medio de denuncias de la oposición de que se trata de una amenaza a la democracia.
Funcionarios del Departamento de Estado saludaron lo que describieron como un debate político en torno a la reforma electoral, pero López Obrador dijo que el departamento siempre «se inmiscuye en asuntos que no le corresponden».
El lunes, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, emitió un comunicado en que expresó que un «gran debate sobre las reformas electorales» reflejaba la «vibrante democracia» de México.
«Creemos que un sistema electoral independiente y bien dotado de recursos y el respeto a la independencia judicial apoyan una democracia saludable», dijo Price
La protesta, sin embargo, no representó para el presidente mexicano un debate político, y reaccionó en su conferencia de prensa diaria diciendo que los comentarios de Washington reflejaban una «mala costumbre» y eran «muy contrarios» a los mensajes del presidente Joe Biden.
El lunes, López Obrador describió a los participantes de la protesta como conservadores que están en contra su proyecto político y los llamó “antidemocráticos”.
“No les importa la democracia, sino lo que quieren es que continúe el predominio de una oligarquía, un gobierno de los ricos”, dijo López Obrador.
Antes del comunicado de Price, el subsecretario de Estado de Estados Unidos para el Hemisferio Occidental, Brian A. Nichols, dijo en un mensaje por Twitter que en México se veía un gran debate sobre reformas electorales que “ponen a prueba la independencia de instituciones electorales y judiciales”.
“Estados Unidos apoya instituciones electorales independientes que tienen recursos para fortalecer procesos democráticos y estado de derecho”, añadió Nichols.
Crédito: Voz de América