Las academias militares ante el colapso del control de Xi mientras los veteranos presionan para un comité de transición
Siguen surgiendo indicios de que el control de Xi Jinping sobre el poder se está debilitando. El 28 de junio, el régimen chino anunció la creación de tres importantes academias militares, una medida institucional que los analistas consideran una señal de un cambio significativo en el control de las fuerzas armadas. Ese mismo día, surgieron informes sobre el inicio de negociaciones arancelarias por parte del Ministerio de Comercio de China, lo que generó especulaciones sobre la posibilidad de que el rumoreado «Consenso de Cuatro Puntos de Xishan» ya esté influyendo en las decisiones políticas entre bastidores.
Tan solo un día antes, el 27 de junio, la 16ª sesión del 14º Congreso Nacional del Pueblo anunció la destitución de varios delegados, entre ellos el general He Weidong, un leal de alto rango de Xi y vicepresidente de la Comisión Militar Central (CMC) desde 2022.
Sigue desaparecido de la vista pública en medio de informes no confirmados sobre su muerte. Sea o no cierta esta información, la ausencia de He indica la marginación de un representante clave de Xi en el ejército.
¿ Una ruptura estratégica con Xi?
El panorama informativo actual de China sigue estando profundamente fragmentado. Los informes no oficiales se mezclan con narrativas sancionadas por el Estado, y los medios de comunicación críticos con Beijing suelen ser descartados por poco fiables, lo que contribuye a una atmósfera turbia de incertidumbre.
Aun así, los canales oficiales ofrecen indicios reveladores. El 28 de junio, la CCTV confirmó la creación de la Universidad de Armas Combinadas del Ejército, la Universidad de Ingeniería de la Fuerza de Apoyo a la Información y la Universidad de Ingeniería de la Fuerza de Apoyo Logístico Conjunto, detallando sus misiones académicas y planes de estudio.
Reorganización militar
Coincidiendo con este anuncio, el veterano portavoz del Ministerio de Defensa, Wu Qian, en su día considerado el portavoz de Xi en el ejército, fue sustituido.
El 15 de mayo, el coronel Jiang Bin, subdirector de la Oficina de Información del Ministerio de Defensa Nacional, hizo su primera aparición pública como nuevo portavoz. Esta transición marcó no solo un cambio de personal, sino lo que muchos consideran un cambio más amplio que lo aleja del control de Xi.
El nombramiento de Jiang, junto con la reestructuración de las academias, señala un esfuerzo por “reconstruir el ejército desde cero”. Los observadores coinciden: la era de dominio militar de Xi Jinping prácticamente ha terminado.
La doctrina militar de Xi, dejada de lado
En las declaraciones públicas de Jiang Bin, se afirmó que las reformas militares reflejaban el «espíritu de la Tercera Sesión Plenaria del XX Congreso del Partido», un cambio notable con respecto al lenguaje anterior. Bajo el gobierno de Xi, las principales iniciativas militares siempre se enmarcaban en el «Pensamiento de Xi Jinping sobre el fortalecimiento del ejército». Ahora, ese lenguaje brilla por su ausencia.
La actual Comisión Militar Central, dirigida por Zhang Youxia, parece estar alejándose deliberadamente de la impronta ideológica de Xi. La omisión del nombre de Xi sugiere que su influencia en las fuerzas armadas se ha visto significativamente reducida.
Estas academias, recientemente reorganizadas, se inauguraron tan solo seis semanas después de una reunión no revelada del Politburó (el máximo órgano de gobierno de China) celebrada el 15 de mayo, que supuestamente marcó la salida formal de Xi. La rapidez con la que se pusieron en marcha estas instituciones refleja una campaña decisiva para desmantelar la base militar de Xi.
La caída de la facción del ejército
Los observadores señalan que el uso del término «Ejército» en las tres nuevas academias no es casual. Xi había consolidado su fuerza militar principalmente a través del 31.º Grupo del Ejército, a veces conocido en línea como su «Guardia Pretoriana». Ahora, esa misma facción parece estar desmoronándose.
Según informes, las investigaciones se han centrado en oficiales de alto rango leales a Xi, como He Weidong, Miao Hua, Zhao Keshi y Qin Shutang, así como en generales más jóvenes de rango de teniente y mayor general, especialmente de la base de Fujian. Otros incidentes que involucran a comandantes de los Comandos de las Operaciones de Operaciones Occidental y Oriental han alimentado aún más la percepción de que las principales unidades militares de Xi están siendo desmanteladas sistemáticamente.
El analista Zhao Lanjian, quien previamente advirtió que Xi planeaba una invasión a Taiwán, afirmó recientemente que figuras clave, como Zhao Lei, Yang Yi, Kong Jun y Li Hanjun, están siendo investigadas activamente. Estos informes sugieren que los militares leales a Xi están cayendo uno a uno.
Con la facción de Xi desarraigada, el ejército se percibe ahora como apátrida y en transición. Las nuevas academias representan un esfuerzo urgente para reconstruir y estabilizar el liderazgo. Al mismo tiempo, la purga total de los partidarios de Xi deja pocas posibilidades de que este retome el control militar.
¿Podría estar en marcha un cambio de poder más amplio?
Rumores ajenos al ámbito militar refuerzan esta narrativa. Los informes sugieren:
- Xi podría no asistir a la próxima cumbre de los BRICS.
- Peng Liyuan, la esposa de Xi, ha aparecido sola en visitas diplomáticas.
- La madre de Xi, Qi Xin, podría haber fallecido, un hecho que supuestamente permanece en secreto.
- El ex director de la DIA, el teniente general Michael Flynn, publicó el 27 de junio una alusión a una transferencia del máximo poder en China.
Estos acontecimientos alimentan las especulaciones de que la salida de Xi no sólo es inminente; sino que podría ya estar en marcha.
El consenso de Xishan
En medio de esta incertidumbre, el llamado Consenso de Cuatro Puntos de Xishan también ha cobrado protagonismo como posible marco para gestionar la salida de Xi. «Xishan» (que literalmente significa «Montaña del Oeste») se interpreta simbólicamente como una referencia al ocaso del gobierno de Xi.
El consenso se centra en cuatro puntos. El primero: el futuro de Xi como Secretario General se abordará en la Cuarta Sesión Plenaria de agosto, un momento que se considera cada vez más crucial.
¿Quién dirigirá a China en la transición?
Una pregunta clave se cierne sobre el tapete: si Xi se marcha, ¿quién asumirá el poder? El consenso ofrece una solución: un Comité Asesor Central. Aunque no se ha establecido formalmente, detalles filtrados sugieren que el plan ya circula entre los altos cargos del partido.
Normalmente, la creación de un comité de este tipo requeriría enmiendas constitucionales, votaciones del Politburó y la nominación de jubilados elegibles. Discursos filtrados atribuidos a Hu Jintao y Wen Jiabao respaldan la restauración del liderazgo colectivo y la prohibición del culto a la personalidad, temas centrales que impulsan la creación de este órgano de transición.
La idea rectora: los ex líderes, particularmente Hu, supervisarían la transición para garantizar la supervivencia del partido.
Los veteranos toman el control
Independientemente de si el Comité Asesor Central se formaliza o no, su influencia parece real. Fuentes afirman que ya tiene la facultad de asistir a las reuniones del Comité Permanente del Politburó e influir en las decisiones. De hecho, Xi se ha convertido en una figura simbólica, marginado por lo que algunos describen como la «Facción de los Cuatro veteranos».
Se dice que este grupo, compuesto por Hu Jintao, Wen Jiabao, Li Ruihuan y Zeng Qinghong, ejerce una influencia comparable a la de los miembros oficiales del Comité Permanente. Aunque no son oficiales, se dice que toman las decisiones entre bastidores.
Negociaciones comerciales y organismos de control globales
El cuarto punto del Consenso de Xishan se centra en la diplomacia, en particular en las relaciones entre China y Estados Unidos. Un resumen filtrado de un supuesto acuerdo comercial describe las principales demandas de Estados Unidos, entre ellas:
- Permitir el libre funcionamiento de Twitter/X, Facebook y YouTube en China.
- Igualdad de trato para empresas extranjeras y privadas.
- Exportaciones de tierras raras sin restricciones.
A cambio, Estados Unidos reduciría los aranceles al 20 %. Sin embargo, el 28 de junio, el Ministerio de Comercio rechazó la idea de plano, declarando: «China se opone firmemente a que cualquier parte llegue a un acuerdo en detrimento de sus intereses a cambio de las llamadas reducciones arancelarias». El lenguaje contundente sugiere que desbloquear las plataformas extranjeras sigue siendo una línea roja.
El hecho de que se alcance un acuerdo antes de que expire la pausa arancelaria recíproca el 9 de julio puede servir como la primera prueba real de la capacidad del Comité Asesor Central de actuar de manera independiente y decisiva.
En resumen, China parece estar entrando en una era post-Xi. Las academias militares, la destitución de los leales a Xi y el surgimiento de un consenso entre los líderes del partido apuntan a una transición de poder cuidadosamente gestionada que ya está en marcha. En las próximas semanas se decidirá si Xi se mantiene como un líder simbólico, se retira formalmente o se desvanece en el olvido político.
Seguiremos de cerca los cambios políticos en China. Esta noticia está en desarrollo y se irán añadiendo actualizaciones a medida que se produzcan nuevos acontecimientos. Las opiniones expresadas en este artículo son responsabilidad exclusiva del autor .
Por Janet Huang
