La fiesta de las borlas: una antigua historia china sobre el perdón
El rey Zhuang de Chu (楚莊王) fue uno de los Cinco Hegemones del Período de Primavera y Otoño (春秋五霸, 770-476 a.C.), y el monarca más consumado de Chu.
En una celebración tras la represión de una rebelión, el rey Zhuang y sus ministros bebieron hasta la saciedad. El rey Zhuang hizo que su concubina Xu Ji brindara con los ministros. Por la noche, ordenó a la corte que encendiera velas, y los cantos y bailes continuaron.
De repente, una ráfaga de viento apagó las velas. En la oscuridad, uno de los cortesanos borrachos tiró de la ropa de Xu Ji. En aquellos días, no se permitía la entrada de hombres en el palacio a menos que estuvieran castrados. Agredir a una concubina de esta manera era un delito grave. Ella arrancó la borla del sombrero del cortesano y pidió al rey Zhuang que se ocupara de él. El rey Zhuang no solo no hizo nada al respecto, sino que también dijo en voz alta que todos deberían quitarse las borlas, relajarse y disfrutar. Cuando todos los ministros se quitaron las borlas, el rey Zhuang ordenó que se volvieran a encender las velas.
Xu Ji estaba sorprendida y enojada. Cuando terminó el banquete, se quejó ante el rey. Éste le contestó: «Es excusable ser descuidado después de beber. Si condenara a muerte a un ministro por algo así, se enfriarían los corazones de los demás ministros, y no serían capaces de dar lo mejor de sí mismos para defender el país».
Xu Ji asintió, escuchó y estuvo de acuerdo.
No cabe duda de que el ministro tenía la culpa por su comportamiento de borracho, pero el rey Zhuang demostró tener una perspectiva amplia por la forma en que manejó el incidente. Con el tiempo, se vio recompensado por su amabilidad.
Cuando el rey Zhuang dirigía sus tropas para atacar el estado de Zheng, se encontró en una emboscada y en una situación crítica. Tang Cui, el vice general del ejército de Chu, se precipitó sin ayuda a las líneas enemigas y rescató al rey Zhuang del caos. El rey de Chu se mostró muy agradecido y quiso recompensarle. Entonces, Tang Cui le dijo que había sido él quien había tirado de la ropa de Xu Ji en «la fiesta de las borlas».
Más tarde, la historia de «la fiesta de las borlas (絕纓之宴 Jué yīng zhī yàn)» se utilizó como alusión a tratar a la gente con generosidad.
La tolerancia no significa renunciar a la propia dignidad; la tolerancia es el uso de la sabiduría y la virtud para tratar a los demás con benevolencia.