La evolución monetaria de la libertad: el plan de Milei para transformar la economía argentina

En un discurso pronunciado el 13 de mayo durante el Congreso del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF), el presidente Javier Milei presentó su visión para una “revolución monetaria de la libertad”, una frase que encapsula su estrategia para transformar el sistema económico argentino.
Centrado en la liberalización monetaria y cambiaria, Milei detalló los avances de su gobierno y anticipó medidas que buscan devolver a los ciudadanos la libertad de elegir cómo y en qué moneda realizar sus transacciones, un paso clave en su proyecto de construir “el país más libre del mundo”.
Un diagnóstico de restricciones y temores
Milei comenzó su exposición destacando que su administración ya ha dado pasos significativos hacia la libertad monetaria. “Hemos permitido que todos los individuos hagan las transacciones en la moneda que se les dé la gana”, afirmó, refiriéndose a la flexibilización de restricciones cambiarias implementadas desde el inicio de su mandato en diciembre de 2023. Sin embargo, reconoció un obstáculo cultural: el miedo de los argentinos a operar en monedas extranjeras, especialmente el dólar, debido a décadas de regulaciones opresivas y controles estatales. “No lo hacen porque en el fondo tienen miedo de dejar los dedos marcados”, señaló, aludiendo a la desconfianza generada por intervenciones pasadas del Estado.
Este temor, según Milei, es un residuo de políticas que han castigado la iniciativa individual y restringido la libertad económica. Su gobierno, en colaboración con el Ministerio de Economía, el Banco Central y la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARCA), está trabajando en modificar normativas para garantizar que nadie sea perseguido por elegir la moneda de su preferencia. “Estamos trabajando para flexibilizar estas normas para que nadie los persiga”, aseguró, marcando un compromiso con la eliminación de barreras legales y burocráticas.
La remonetización y la abundancia de dólares
Un pilar central de la “evolución monetaria de la libertad” es el proceso de remonetización que Milei describió como un motor para estabilizar la economía. Según el presidente, la Argentina tiene un “potencial enorme de remonetización” que permitirá aumentar la confianza en el peso y, paradójicamente, fortalecer la circulación de dólares. “El resultado es que va a haber más dólares, que van a ser tantos respecto de los pesos, que podemos librarnos del Banco Central”, afirmó, reiterando su objetivo de largo plazo de cerrar la institución que considera responsable de la inflación crónica del país.
Milei explicó que, al converger hacia tasas de inflación más bajas, similares a las de economías desarrolladas, los argentinos comenzarán a demandar más pesos, lo que reducirá la presión sobre el tipo de cambio. “Esa remonetización hace que el tipo de cambio tenga que caer”, sostuvo, destacando que este proceso debe ser ordenado para evitar quiebras empresariales. Su estrategia incluye evitar la emisión monetaria descontrolada, un principio que ha guiado su política de “emisión cero” desde el inicio de su gestión. “Está el riesgo de que haya empresas que vayan a la quiebra, por eso hay que remonetizar la economía sin emitir dinero”, enfatizó.
Resultados concretos y una economía en transición
El discurso de Milei no solo proyectó un futuro ambicioso, sino que también celebró los logros alcanzados. Desde su asunción, la inflación ha disminuido significativamente, pasando de un ritmo anual proyectado del 17.000% en diciembre de 2023 a un 2.2% mensual estimado para enero de 2025, según proyecciones de Econométrica. Esta desaceleración, combinada con una reducción del 26.4% en el peso real del gasto público sobre el PBI, refleja el impacto de su ajuste fiscal y monetario, descrito como el más significativo en tres décadas.
Además, el superávit fiscal alcanzado en los primeros meses de 2024 ha permitido sanear las finanzas públicas, eliminando la necesidad de emitir moneda para cubrir déficits, una práctica que Milei atribuye a los gobiernos peronistas anteriores. La reducción del 80% en el riesgo país y la estabilización del dólar paralelo, que cayó de $1.500 a $1.100 tras un pico especulativo, son otros indicadores de confianza en su modelo.
Hacia un sistema de libre competencia monetaria
La visión de Milei apunta a un sistema de libre competencia de monedas, donde el peso y el dólar (u otras divisas) coexistan sin restricciones. El ministro de Economía, Luis Caputo, complementó esta idea al anunciar que, desde enero de 2025, los precios de bienes y servicios podrán exhibirse en dólares u otras monedas extranjeras, además de en pesos, facilitando una transición hacia esta libertad cambiaria. Este enfoque, según Milei, no solo empodera a los ciudadanos, sino que prepara el terreno para una dolarización de facto, un objetivo que, aunque pospuesto respecto a sus promesas de campaña, sigue siendo un horizonte estratégico.
El presidente defendió la liberalización del mercado cambiario, destacando que no ha generado los temidos movimientos abruptos en el tipo de cambio. “Liberamos el mercado de cambios y el tipo de cambio no subió”, afirmó, desafiando a los críticos que advertían sobre un supuesto atraso cambiario. Esta estabilidad, combinada con un crecimiento proyectado del 5% para 2025 y 2026 por el Fondo Monetario Internacional, sugiere que la economía argentina está entrando en una fase de recuperación.
Un legado de libertad económica
La “evolución monetaria de la libertad” de Milei no es solo una política económica, sino una filosofía que busca devolver al individuo el control sobre sus decisiones financieras. Al eliminar restricciones cambiarias, reducir la intervención del Estado y fomentar la confianza en el sistema monetario, el presidente aspira a construir una Argentina donde la libertad económica sea la norma. “Vamos a ser ricos y vamos a viajar por todo el mundo”, proclamó en la Expo EFI 2025, reflejando su optimismo sobre un futuro próspero.
Con medidas concretas ya en marcha y un plan ambicioso para los próximos años, Milei está redefiniendo el panorama económico argentino. Si bien el camino no está exento de desafíos, los indicadores actuales sugieren que su “revolución monetaria” está ganando terreno, ofreciendo a los argentinos una perspectiva de estabilidad y libertad que parecía inalcanzable hace apenas dos años.