«La educación pública ha hecho muchísimo daño lavando el cerebro de la gente»: Milei habló sobre el marxismo en las universidades

Este  martes, el presidente argentino Javier Milei habló en el marco del Foro Económico Internacional de las Américas (IEFA) llevado a cabo en la Ciudad de Buenos Aires. Durante su exposición, el mandatario habló del “lavado de cerebro” que se produce en el sistema educativo argentino por los autores «nefastos» que se leen, apuntando directamente a la literatura comunista.

El presidente libertario fue el último disertante en el encuentro de empresarios de Energía llevado a cabo en el Hotel Four Seasons. Para sorpresa de los participantes, pidió que las luces de los reflectores apunten hacia el público, por lo que su discurso fue pronunciado en las sombras. Lo acompañaron su hermana y secretaria general de Presidencia, Karina Milei y el vocero presidencial, Manuel Adorni.

El mandatario hizo un repaso de los primeros 100 días de gobierno y, dentro del marco académico, sostuvo que «la educación pública, de gestión privada o estatal, ha hecho mucho daño lavando el cerebro de la gente y llevando a la lectura de autores que han sido nefastos para la historia de la humanidad, y en especial para la Argentina». 

“Yo siempre hago el chiste de que si ustedes van a la Universidad de Buenos Aires, a la Facultad de Ciencias Económicas, y preguntan quién es Ludwig von Mises, le van a decir que es el 9 de Holanda y para otros es el mejor economista de todos los tiempos junto a Murray Newton Rothbard. Eso sí, al barbudo alemán, al empobrecedor de Marx, sí lo conocen”, afirmó el presidente. 

Semanas atrás, durante el discurso que brindó durante la apertura de sesiones ordinarias en el Congreso de la Nación, el mandatario libertario también había hecho declaraciones en el mismo sentido hacía la bajada ideológica en la educación: «En los profesorados e institutos de formación docente proliferan currículas educativas de izquierda, abiertamente anticapitalistas y antiliberales, en un país en el cual lo que se necesita es más capitalismo y más libertad«.

Milei apuntó duramente hacia el kirchnerismo en el inicio de su relato: «Argentina ha vivido por más de 20 años bajo un régimen populista salvaje». Y continuó: «No es para llorar, no es para llorarla… si verdaderamente llegábamos a ganar era porque esto estaba en una situación desastrosa. Que un liberal libertario llegue al poder significaba que nos iban a dejar las cosas muy difíciles». 

El jefe del Ejecutivo habló también del ajuste que se está llevando a cabo para remediar los desastres dejados tras años de populismo y anunció la baja de 70 mil contratos de empleados del Estado: «Echamos 50.000 empleados públicos, no solo eso, sino que además se dieron de baja contratos, fíjense que ahora están cayendo más contratos y van a caer 70.000 contratos«.

También habló con orgullo de haberle puesto fin a la obra pública: «Es una gran fuente de corrupción y robo a la cual toda la gente de bien debería oponerse».

Tras hacer la dura descripción de todas las medidas que se están tomando, habló con optimismo sobre la esperanza y el apoyo del pueblo argentino a su gestión, diciendo que “pese a que estamos peor en el presente, el 50% de los argentinos están convencidos que de acá para adelante vamos a estar mejor”, y explicó que ese porcentaje ha ido creciendo desde que asumió su gobierno en diciembre, cuando la esperanza de que las cosas iban a mejorar solo rondaba el 20%. 

«La gente tiene esperanza, la gente la está viendo a pesar de que hoy la está pasando mal. Se dio cuenta que el populismo no lleva a ningún lado. Decidieron dejar de ser corderos para ser leones; y están abrazando las idas de la Libertad«, concluyó el presidente.