La compra de balas a Israel desconcierta a la coalición izquierdista española Sumar
La decisión del Gobierno socialista español de dar marcha atrás en su promesa de cancelar un contrato de compra de balas a una empresa israelí provocó el miércoles el rechazo de sus socios menores de la coalición, y algunos aliados amenazaron con retirar su apoyo.
El gobierno minoritario del primer ministro Pedro Sánchez ha tenido dificultades para aprobar leyes desde que consiguió un nuevo mandato formando una alianza de partidos separatistas regionales y de izquierda en 2023.
El martes, Sánchez enfureció a su socio menor de extrema izquierda, Sumar, después de revelar un plan para aumentar el gasto de defensa.
España, crítica desde hace mucho tiempo de las políticas de Israel en los territorios palestinos, se comprometió en octubre de 2023 a dejar de vender armas a Israel por su guerra con Hamás en Gaza y el año pasado amplió ese compromiso para incluir la compra de armas.
Sumar, una plataforma de partidos de izquierda que controla cinco ministerios liderados por la viceprimera ministra Yolanda Díaz, dijo el miércoles que la compra de municiones era «una flagrante violación» del acuerdo que había hecho con los socialistas para formar una coalición.
«Exigimos la rectificación inmediata de este contrato», afirmó en un comunicado.
El Ministerio del Interior dijo en octubre pasado que estaba cancelando un contrato por valor de 6,6 millones de euros (7,53 millones de dólares) para comprar más de 15 millones de rondas de 9 mm de Guardian LTD Israel.
El miércoles dijo que el fiscal del estado le había informado que romper el contrato habría significado pagar el monto total sin recibir el envío.
Guardian LTD Israel no hizo comentarios inmediatos sobre la decisión.
El diputado de Izquierda Unida Enrique Santiago, cuyo partido forma parte de Sumar, sugirió que existen motivos legales para rescindir el contrato sin pagar pero que incluso «un incumplimiento de contrato de sólo unos seis millones (de euros) será aplaudido por todo el país».
Cuando se le preguntó si IU podría abandonar el gobierno de coalición, dijo a los periodistas: «Actualmente estamos considerando todos los escenarios».
Antes de que se conociera la noticia del contrato de municiones, Díaz había dicho que su grupo no estaba de acuerdo con el aumento del gasto de defensa, particularmente con un plan para adquirir más armas, pero que la coalición gozaba de buena salud y que terminaría el período legislativo que termina en 2027.
Reuters
