¿Kash Patel ha comenzado a «limpiar» el FBI de Washington?

El Buró Federal de Investigaciones (FBI) ordenó el viernes la reubicación de 1500 empleados de su sede en Washington, según informaron dos fuentes a Reuters.

De acuerdo con estas fuentes, alrededor de 1000 empleados serán trasladados a oficinas de campo en distintas partes de Estados Unidos, mientras que otros 500 se reubicarán en Huntsville, Alabama. La notificación fue comunicada a los empleados en una reunión el viernes.

Hasta junio de 2024, el FBI contaba con 9414 empleados en Washington y un total de 37478 en todo el país, según registros oficiales.

El director del FBI, Kash Patel, asumió su cargo el viernes tras ser confirmado por el Senado con una votación de 51-49. Dos senadores republicanos votaron en contra debido a preocupaciones sobre su pasado activismo político y su posible impacto en la misión del FBI.

«Les prometo lo siguiente: habrá rendición de cuentas dentro y fuera del FBI, y lo haremos mediante una supervisión rigurosa y constitucional a partir de este fin de semana», declaró Patel tras asumir el cargo.

En respuesta a una consulta de Reuters sobre estos movimientos, el FBI no confirmó ni desmintió directamente la información, limitándose a decir que «el director Patel ha dejado claro su compromiso con el pueblo estadounidense de que los agentes del FBI estarán en las comunidades combatiendo el crimen violento. Ha ordenado a la dirección del FBI que implemente un plan para hacer realidad esta promesa».

Patel asume el liderazgo del FBI en un momento en que la administración de Trump busca redefinir la agencia y su dependencia, el Departamento de Justicia, limpiándolo de burócratas que -según ellos- no responden al pueblo estadounidense sino a sus propios intereses. Es parte de lo que llaman «drenar el pantano» en referencia al establishment de Washington.

En el primer mes del gobierno de Trump, al menos 75 abogados de carrera del Departamento de Justicia y altos funcionarios del FBI han renunciado, sido despedidos o relevados de sus cargos.

Patel había anticipado su plan de reestructuración en su libro «Government Gangsters», donde propuso trasladar la sede del FBI fuera de Washington D.C. para evitar la «captura institucional» y frenar el involucramiento de la dirección del FBI en juegos políticos.

El nuevo director ha indicado que reforzará el papel del FBI en la lucha contra la inmigración ilegal y el crimen violento, prioridades clave para Trump, permitiendo que «los buenos policías sean policías». Asimismo, reducirá el trabajo de investigación en la sede de Washington, donde se llevan a cabo investigaciones de contrainteligencia, seguridad nacional y corrupción pública.

El FBI cuenta con una oficina en Huntsville, ubicada en Redstone Arsenal, una base del Ejército de EE.UU. que también alberga instalaciones del Departamento de Defensa y la NASA.

Patel ha sido un firme defensor de la idea de que una «estructura paralela» dentro del gobierno ha buscado debilitar a Trump y afectar sus perspectivas políticas.