El cuerpo de McAfee aún no ha sido entregado, lo que incrementa versiones sobre posible asesinato

Un año después de su presunto suicidio, el magnate del software John McAfee continúa despertando las emociones de la gente, ya que las autoridades españolas aún se niegan a entregar su cuerpo, lo que genera sospechas de que en realidad fue asesinado.

McAfee fue encontrado muerto en su celda en la cárcel Brians 2 del área de Barcelona el 23 de junio de 2021 después de ocho meses de prisión, solo unas horas después de que un juez dictaminara que McAfee sería extraditado a los EE. UU. para enfrentar cargos de evasión fiscal.

Las autoridades afirmaron de inmediato que McAfee, de 75 años, se había quitado la vida. La policía alegó que ya había intentado quitarse la vida unos meses antes de la supuesta fecha de su muerte, pero también dijeron lo mismo sobre Jeffrey Epstein.

En febrero, siete meses después de la muerte de McAfee, un juez español confirmó el fallo original de que McAfee se suicidó en la cárcel, informó Reuters.

Algunos alegan que la decisión se dictó sin ninguna evidencia de ese reclamo, entregando su cuerpo a su familia, un informe de autopsia o cualquier otra documentación.

Sin embargo, en varias ocasiones, McAfee había reiterado que estaba de buen humor y que nunca tuvo la intención de suicidarse, declarando en Twitter: “Si me ahorco, a la Epstein, no será culpa mía”.

La sospecha sacude las redes sociales

El secretismo que rodea a la muerte de McAfee y la reticencia de las autoridades a entregar su cuerpo para la autopsia desataron la indignación en las redes sociales, que se llenaron de comentarios de internautas que especulaban con que el extravagante empresario se había suicidado a manos de funcionarios que querían callarlo.

McAfee, un ex influencer de la moneda digital y enemigo de la élite debido a su indiscreción, había estado suelto durante varios años evadiendo a los cobradores del Servicio de Impuestos Internos que afirmaban que había eludido el pago de impuestos sobre la renta. 

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También fue mencionado como persona de interés en dos asesinatos y un caso de violación, y fue buscado por el sistema legal de Belice, según MarketWatch.

Sin embargo, McAfee sostuvo que no evadió el pago de impuestos. En cambio, se negó a pagarlo, al mismo tiempo que se negaba a reconocer la autoridad de cualquier estado sobre él, una actitud que en última instancia puede haberle costado la vida.

Previendo su propia muerte

McAfee dijo que los federales venían por él y parecía prepararse para ser silenciado por los agentes hasta el punto de volverse paranoico, según algunos.

En un tweet de 2019, McAfee pareció sugerir que los funcionarios del gobierno le advirtieron que estaban planeando matarlo y hacer que pareciera un suicidio.

“Recibir mensajes sutiles de funcionarios estadounidenses que dicen, en efecto: ‘¡Vamos a por ti, McAfee! Vamos a suicidarte’. Hoy me hice un tatuaje por si acaso. Si me suicido, no lo hice. Fui [asesinado] ‘whackd’. Revisa mi brazo derecho”, escribió McAfee, quien nunca tuvo miedo de la atención pública.

Otros especularon que McAfee fue asesinado por desafiar al estado profundo.

“John McAfee hizo un video en 2020 llamando al estado profundo… una semana después de que se hiciera ese video, había una orden de arresto contra él… un año después lo encuentran muerto…”, escribió otro usuario de Twitter. “John McAfee no se suicidó”.

Mientras tanto, la viuda de McAfee, Janice, sigue presionando para obtener respuestas. “Desde entonces [sic] no ha habido ninguna urgencia por parte de las diversas autoridades españolas involucradas en la investigación de la muerte de John y claramente está ocurriendo un encubrimiento aquí con respecto a los eventos que rodearon su muerte”, escribió en Twitter en el momento de su muerte, según el Free Thought Project Podcast.

“No hemos recibido el certificado de defunción, el informe oficial de la autopsia o el informe oficial de la prisión”, continuó. “Entiendo que las cosas lleven tiempo, pero la falta de cooperación de las autoridades españolas solo confirma nuestras sospechas de que tienen algo que ocultar”.