Milei viaja a Brasil y se encontrará con Bolsonaro en la cumbre conservadora CPAC

El presidente argentino Javier Milei realizará este fin de semana su primer viaje oficial a Brasil desde que asumió el cargo, pero no para reunirse con su homólogo brasileño Luiz Inácio Lula da Silva. En su lugar, Milei participará en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) donde se encontrará con el exmandatario Jair Bolsonaro.

El vocero presidencial Manuel Adorni confirmó que Milei asistirá el sábado 6 de julio al evento CPAC en la ciudad balnearia de Camboriú, estado de Santa Catarina. Este encuentro conservador, que se extenderá hasta el domingo 7, reúne a «cientos de organizaciones conservadoras, miles de activistas, millones de televidentes y los mejores y más brillantes líderes del mundo», según describe su página oficial.

La decisión de Milei de participar en CPAC llega en medio de crecientes tensiones con el actual presidente brasileño Lula da Silva. El mandatario argentino optó por no asistir a la Cumbre de Presidentes del Mercosur que se celebrará el lunes 8 de julio en Paraguay, ya que se superpone con la celebración de la Independencia argentina.

Adorni explicó que la ausencia de Milei en la cumbre del Mercosur se debe a «cuestiones de agenda» y para evitar «una sobrecarga». El lunes 8 por la noche está previsto el inicio de la vigilia previa al Pacto de Mayo, que se firmará en Tucumán el día 9.

Sin embargo, las diferencias ideológicas entre Milei y Lula son evidentes. Durante su campaña electoral, el libertario argentino calificó a Lula de «comunista enojado» y «corrupto», luego de que Lula apoyara abiertamente a su rival político Sergio Massa y le envíe asesores para ayudarlo en su campaña.

Recientemente, Milei reafirmó sus declaraciones: «¿Cuáles son los problemas? ¿Que le dije corrupto? ¿Y acaso no fue preso por corrupto? ¿Y qué le dije, comunista? ¿Y acaso no es comunista? ¿Desde cuándo hay que pedir perdón por decir la verdad?»

Por su parte, Lula manifestó en una entrevista televisiva que no ha hablado con Milei desde que este asumió la presidencia y considera que el argentino debería disculparse por sus palabras. «No conversé con el presidente de Argentina porque creo que él debe pedirle disculpas a Brasil y a mí. Dijo muchas tonterías. Sólo quiero que él pida disculpas», expresó Lula.

El mandatario brasileño también reveló que evitó deliberadamente a Milei durante la cumbre del G7. «Yo quiero a Argentina, es un país que me gusta mucho, es un país muy importante para Brasil, y Brasil es muy importante para Argentina. No es un presidente de la República quien va a crear cizaña entre Brasil y Argentina», añadió Lula.

A pesar de estas tensiones, Adorni insistió en que la «brecha ideológica astronómica» entre ambos líderes no es la razón de la falta de encuentro. «Nunca vamos a estar ausentes por ese motivo», afirmó el vocero.

La participación de Milei en CPAC Brasil fue confirmada por Eduardo Bolsonaro, hijo del expresidente brasileño, quien anunció en redes sociales: «Conversé ahora con el presidente de Argentina, Javier Milei, quien confirmó que vendrá al CPAC de Brasil». Eduardo también adelantó la alta probabilidad de un encuentro entre Milei y su padre, Jair Bolsonaro.

El evento CPAC contará con la presencia de gobernadores, diputados y líderes brasileños, así como figuras de la derecha latinoamericana como el mexicano Eduardo Verásategui y el chileno José María Kast.

Mientras tanto, la ministra de Relaciones Exteriores de Argentina, Diana Mondino, asistirá en representación de Milei a la cumbre del Mercosur en Paraguay. Esta cumbre se perfila como un encuentro crucial para el bloque comercial en un momento de tensiones políticas y desafíos económicos regionales.

El viaje de Milei a Brasil y su participación en CPAC ocurren en un contexto de creciente polarización política en América Latina. El presidente argentino ha estado involucrado recientemente en disputas públicas con otros líderes de la región, incluidos el primer ministro español Pedro Sánchez, el presidente colombiano Gustavo Petro y el presidente boliviano Luis Arce.

De hecho, el gobierno boliviano convocó al embajador argentino después de que la oficina de Milei calificara de «fraudulento» un supuesto intento de golpe de Estado en Bolivia.

Estos incidentes diplomáticos subrayan el enfoque confrontativo de Milei en las relaciones con la izquierda internacional y su alineamiento con líderes conservadores como Bolsonaro.