Inflación en Argentina: qué se compraba hace 10 años con 1000 pesos y que no se puede comprar hoy
La inflación en Argentina entre 2012 y 2022 superó el 2.000%, una devaluación de la moneda que no tiene correlativo en otro lugar del mundo, salvo en la dictadura de Venezuela, y en Turquía.
El nivel general del Índice de precios al consumidor registró un alza mensual de 4,7% en febrero de 2022 y una variación interanual de 52,3%.
En febrero de este año, el Índice de Precios al Consumidor avanzó un 4,7% respecto a enero, impulsado por la subida de los alimentos (7,5%) y el transporte (4,9%), según el último informe ofrecido por el Instituto Nacional de Estadística y Censos.
En cuanto a los alimentos, en tan solo un año todo cambió. Si en el 2011, se llenaba el “changuito” de compras con $1.000 (pesos argentinos), en el 2021 no alcanzaba para 2 kilos de asado.
La inflación acumulada estimada entre septiembre/octubre de 2011, y octubre de 2021, era de 1.936%. Ahora en el 2022, roza el 2.000% respecto al 2012.
En 2011, se podía llenar un changuito con casi 60 productos de primeras marcas por $1.000, incluyendo varios kilos de carnes, verduras, alimentos básicos, bebidas y productos de higiene y limpieza. Pero en el 2021, hacer esa misma compra costaba más de $18.000, según un cálculo hecho por Infobae.
¿Entonces, qué se puede comprar en el 2022 con estos $1.000?
Una de las comidas más apetecidas por los argentinos es el asado, y en la actualidad con $1.000 se puede conseguir aproximadamente 1 kilo, mientras que hace una década se podían comprar 32 kilos.
Otro ítem, que es también un alimento esencial para los argentinos es la leche. Si en el 2012 se podían adquirir 257 litros con $1.000, hoy, con ese monto de dinero, solo podemos comprar 11 litros, aun cuando la gran mayoría de estos productos están bajo el esquema de precios cuidados y/o con subsidios del Estado.
Comparación con otros productos:
- Un paquete de fideos de 500 gramos pasó de costar $4,39 en 2012 a $59 en 2022, lo que equivale a un incremento del 1.243%. Con $1.000 en 2012 uno podía comprar más de 200 paquetes, hoy con suerte alcanza para 15.
- Una botella de gaseosa de 2 litros y un cuarto costaba $8 y en nuestros días está saliendo $280. Nuevamente, el incremento fue atroz, superando el aumento de la canasta básica y llegando al 3.383%.
- El agua mineral de 2,25 litros en los supermercados bonaerenses pasó de un valor promedio a lo largo de las principales marcas de $5,78 a $111, un aumento del 1.820%. En 2012, las familias argentinas podían comprar poco más de 170 botellas con $1.000, hoy no alcanza ni para 10.
En febrero, la división de Alimentos y bebidas no alcohólicas (7,5%) fue la de mayor aumento del mes a nivel nacional, además de ser la de mayor incidencia en todas las regiones: en el promedio, aportó más de 2 puntos porcentuales a la suba del Nivel general.
«En enero de este año el precio promedio de un kilo de carne era de 871,74 pesos, un valor que representa un verdadero problema para gran parte de los consumidores, sobre todo si se tiene en cuenta que el nivel de pobreza escala a casi el 50% de la población del país», de acuerdo con Infobae.
Como alternativas en enero encontrabas un kilo de pollo por $225,90 mientras que uno del corte porcino se ubicaba a $611 el kilo, enero, pero los precios aumentan cada semana.
Dentro de la división Alimentos y bebidas no alcohólicas, lo que más influyó fue la suba de Verduras, tubérculos y legumbres (en algunas regiones mostró alzas superiores al 20%), donde se destacó la suba del tomate, la lechuga, la papa y la cebolla, entre otras.
También sobresalió dentro de la división el alza de Frutas, Leche, productos lácteos y huevos, pan y cereales y carnes y derivados.
A nivel de las categorías, Estacionales (8,4%) fue la de mayor incremento mensual, empujada por la suba en Frutas y, principalmente, Verduras, tubérculos y legumbres.
Aunque parezca increíble, a pesar de la suba de los precios de los alimentos, en el caso de una hamburguesa McDonald, está casi al mismo precio que en 2012.
Sin embargo, esta referencia es en dólares, y si un dólar en Argentina en el 2012 costaba $4,34 en febreroy al precio oficial, para febrero de 2022 su precio es de $106,50.
El índice Big Mac es un indicador basado en el precio de una hamburguesa Big Mac en todo el mundo y refleja el poder adquisitivo de una economía. En enero de 2022, el precio medio de un Big Mac en Argentina era de 4,29 dólares estadounidenses, el doble del valor registrado tres años antes. Sin embargo en 2012 era 4,64 dólares, o sea, más alto que en 2022.
Por su parte, en el mes de febrero aumentó el Transporte un 4,9% de acuerdo con el INDEC, impulsado principalmente por la suba de los combustibles, fue la segunda división de mayor incremento, seguida de Equipamiento y mantenimiento del hogar (4,4%).
¿Podría ser el peor año en tres décadas?
El aumento de precios en Argentina en este 2022 podría volver a superar el 50% anual y así batir el récord de las últimas tres décadas.
Argentina había cerrado 2021 con una inflación del 50,9%. Es una cifra alta, la mayor de Sudamérica después de Venezuela, pero está por debajo del 53,8% que registró el país en 2019, el último año de Mauricio Macri como presidente.
Macri no logró controlar la inflación, sino que fue la más elevada desde el estallido de la crisis económica de 2001.
Su sucesor, Alberto Fernández, tampoco logra detener la escalada de precios.
“Para marzo, la inflación podría volver a subir otro escalón”, dijeron desde Ecolatina.
“Para marzo, esperamos una aceleración todavía superior”, coincidieron desde Consultora especializada en macroeconomía y política (LCG).
El Relevamiento LCG conserva registros altos y un porcentaje elevado de productos con aumentos (18% en la segunda semana del mes). La aceleración de panificados en la última semana (4,8% semanal) es un reflejo del conflicto en Ucrania que difícilmente termine con esa suba.
“Sobre eso se agregan los aumentos autorizados en electricidad y gas (20% cada uno), que sumarán 0,6 punto, la incidencia que tenga el gasto vinculado a educación (colegios privados y útiles). Además, el aumento de combustibles de 9,5% promedio a partir de la segunda mitad de marzo, tendrá una incidencia de 0,2 punto en el IPC de este mes (y 0,3 punto en abril por arrastre del aumento)”, dijeron en LCG y proyectaron un registro cercano a 5% en marzo.