Gates advierte a la Casa Blanca por quitar financiamiento a agencias federales

Bill Gates, cofundador de Microsoft y filántropo en salud global, ha intensificado sus esfuerzos para persuadir a funcionarios de la administración Trump de mantener el financiamiento de programas de salud mundial, incluyendo vacunas para niños y tratamientos contra el VIH, según informaron dos fuentes familiarizadas con el asunto a Reuters. Gates ha advertido que la Fundación Gates, su organización benéfica, no puede llenar los vacíos dejados por la reducción del apoyo gubernamental de Estados Unidos.
En las últimas semanas, Gates se reunió con el Consejo de Seguridad Nacional, así como con legisladores republicanos y demócratas, para abogar por la continuidad de la asistencia internacional en salud, destacando su impacto en salvar vidas, según las fuentes. Un portavoz de la Fundación Gates afirmó: “Bill estuvo recientemente en Washington D.C. reuniéndose con tomadores de decisiones para discutir el impacto vital de la asistencia internacional de EE. UU. y la necesidad de un plan estratégico para proteger a los más vulnerables del mundo mientras se salvaguardan la salud y la seguridad de América”.
Desde su investidura el 20 de enero de 2025, la administración Trump ha tomado medidas para desmantelar la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), recortando más del 80% de sus contratos y congelando miles de millones de dólares destinados a programas que van desde asistencia alimentaria de emergencia hasta la prevención de la malaria.
La administración, liderada por el Departamento de Estado, está revisando qué tipos de ayuda extranjera se mantendrán bajo su política de “América Primero”. Una fuente indicó que alrededor de 30 proyectos de salud global están en consideración, incluyendo organizaciones como Gavi, la Alianza de Vacunas, y el Fondo Global para combatir el SIDA, la Tuberculosis y la Malaria, que reciben anualmente aproximadamente $300 millones y más de $1,000 millones, respectivamente, de Estados Unidos.
Gates enfatizó a los funcionarios con los que se reunió que su fundación no puede asumir el rol del gobierno estadounidense, una posición que los directores de la Fundación también han expresado públicamente, señalando que ninguna fundación tiene la capacidad de reemplazar ese apoyo. Las prioridades principales de la Fundación Gates, como la erradicación de la polio y la lucha contra la malaria, se verán afectadas por esta reducción, y la organización deberá evaluar si y cómo puede mantener esos programas en marcha, según una fuente cercana.
Además, durante sus reuniones con el Consejo de Seguridad Nacional, Gates abogó por que Estados Unidos continúe apoyando a la Organización Mundial de la Salud (OMS), de la que Trump anunció la salida el primer día de su administración, así como los esfuerzos para erradicar la polio. Varias iniciativas del Plan de Emergencia del Presidente para el Alivio del SIDA (PEPFAR) también están en la lista de revisión, según la fuente.
Establecida en 2000, la Fundación Gates cuenta con un presupuesto anual superior a $8,000 millones. Gates ha mantenido reuniones regulares con funcionarios de seguridad en administraciones anteriores para discutir temas clave como la malaria o el COVID-19. Antes de la investidura, se reunió con Trump en una cena en diciembre de 2024, y volvió a la Casa Blanca a principios de febrero de 2025, tras el anuncio inicial de los recortes en USAID, según un reporte de NBC.