Fuerte respaldo popular a la decisión de la Administración Trump de desplegar la Guardia Nacional en Los Ángeles
La decisión del presidente Donald Trump de desplegar 2000 efectivos de la Guardia Nacional en Los Ángeles ha recibido un respaldo contundente, según una encuesta reciente de Insider Advantage (Rating: A) realizada del 10 de junio.
El sondeo reveló que un 59% de los encuestados aprueba la medida, con una diferencia de 20 puntos porcentuales respecto a quienes desaprueban la medida (39%).
Este apoyo refleja que la mayoría de los estadounidenses ven en esta acción un paso firme para restaurar el orden tras los disturbios desencadenados por redadas migratorias.
El despliegue, iniciado el 8 de junio, se produjo tras dos días de protestas violentas en la ciudad californiana, provocadas por operaciones del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) que resultaron en la detención de 118 inmigrantes ilegales entre el 6 y el 8 de junio.
Según reportes, los enfrentamientos incluyeron el uso de gases lacrimógenos y granadas aturdidoras por parte de las autoridades, así como actos de vandalismo como el incendio de vehículos.
Trump justificó la medida el 8 de junio en Truth Social, afirmando: “Si el gobernador Gavin Newsom de California y la alcaldesa Karen Bass no pueden hacer su trabajo, que todos saben que no pueden, entonces el Gobierno federal intervendrá y resolverá el problema”.
El gobernador Newsom, un destacado demócrata, ha criticado duramente la intervención, calificándola en redes sociales como “deliberadamente incendiaria” y una acción que “solo intensificará las tensiones”.
Sin embargo, la opinión pública parece inclinarse hacia el enfoque de Trump, con los primeros 300 efectivos desplegados el 9 de junio ya patrullando las calles de Los Ángeles. La presencia militar, visible en puntos clave como el edificio federal Edward Roybal, ha sido vista por muchos como una respuesta necesaria ante lo que el presidente describió como una “invasión” de inmigrantes ilegales.
Los datos que surgen de los sondeos de opinión sugieren que la estrategia migratoria del presidente, incluida la intensificación de redadas y el uso de la Guardia Nacional, resuena con un sector de la población que valora la seguridad y el control de fronteras.
El apoyo a Trump no se limita a esta decisión específica. Una encuesta de Morning Consult, realizada del 3 al 9 de junio, mostró un sólido 50% de aprobación general a su gestión, con una diferencia de 6 puntos frente a quienes desaprueban su gobierno (44%).
Paralelamente, el Partido Demócrata enfrenta una creciente desaprobación, según un sondeo de Quinnipiac del 5 al 9 de junio, con 1283 casos analizados. Solo un 21% apoya al partido azul, mientras que un 70% lo desaprueba.
Las redadas migratorias, iniciadas el 6 de junio, han sido un punto de inflexión. Según información disponible, el ICE detuvo a unas 2000 personas al día a nivel nacional durante esa semana, con Los Ángeles como epicentro de las protestas. El 7 de junio, el gobernador Newsom condenó las operaciones como “crueles” en un comunicado, pero la respuesta federal, liderada por Trump, escaló con el envío de tropas. El 9 de junio, cerca de 300 soldados ya estaban en el terreno, y para el 10 de junio, la cifra ascendió a 4000 con la incorporación de marines, según reportes.
Los enfrentamientos en barrios como Paramount, donde el 8 de junio se reportaron choques con gases lacrimógenos, han alimentado el argumento de Trump de que la intervención era inevitable. El respaldo popular sugiere que muchos ven estas medidas como un freno al caos, especialmente tras los incidentes del 11 de junio, cuando se reportaron nuevos arrestos.
