Fauci enfrenta intenso interrogatorio republicano en Congreso de EE.UU. sobre gestión de la pandemia

El Dr. Anthony Fauci, exasesor médico jefe de Estados Unidos, se enfrentó a un intenso interrogatorio por parte de los republicanos en el Congreso durante una tensa audiencia el lunes sobre su papel en la gestión de la pandemia de COVID-19.

Fauci, quien dirigió el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) durante la crisis sanitaria, fue cuestionado sobre los orígenes del virus y correos electrónicos de un ex asesor suyo, David Morens, en los que describía el uso de correos electrónicos personales en violación de la política de los Institutos Nacionales de Salud (NIH).

El representante republicano James Comer, presidente del Comité de Supervisión y Rendición de Cuentas de la Cámara, abordó este tema al preguntar a Fauci: «¿Está de acuerdo en que viola la política del NIAID el uso de correos electrónicos personales para fines oficiales?». Fauci respondió: «El asunto del Dr. Morens que fue discutido por este comité viola la política de los NIH, sí».

Comer también cuestionó a Fauci sobre un correo electrónico del 25 de octubre de 2021 en el que Morens aparentemente aconsejaba a Peter Daszak, presidente de EcoHealth Alliance, sobre cómo «engañar a los NIH» en relación con un informe de progreso tardío. «¿Eso viola la política?», preguntó Comer. Fauci admitió: «Eso estuvo mal e inapropiado y violó la política».

Sin embargo, Fauci rechazó las sugerencias de que estuvo involucrado en un encubrimiento para evitar investigar la teoría de que el virus se originó en un laboratorio chino. Cuando el representante Brad Wenstrup, presidente del Subcomité Selecto sobre la Pandemia de Coronavirus, le preguntó si alguna vez discutió el programa de bioarmas de China con la comunidad de inteligencia, Fauci respondió: «Nunca discutí el programa de bioarmas de China, hasta donde tengo conocimiento, con nadie».

En un momento de la audiencia de casi cuatro horas, Fauci se mostró conmovido al hablar sobre las amenazas que han recibido él y su familia. «Ha habido desde acosos por correos electrónicos, mensajes de texto y cartas hacia mí, mi esposa y mis tres hijas. Ha habido amenazas de muerte creíbles que llevaron al arresto de dos individuos», reveló Fauci con la voz entrecortada. «Amenazas de muerte creíbles significan que alguien claramente estaba en camino de matarme. Y ha requerido que tenga servicios de protección esencialmente todo el tiempo».

Cuando la representante demócrata Debbie Dingell le preguntó cómo se sentía en esos momentos, Fauci respondió: «Terrible».

Otro momento tenso ocurrió cuando la representante republicana Marjorie Taylor Greene se negó a referirse a Fauci como «doctor» y lo acusó de haber abusado de los estadounidenses al recomendar medidas como el distanciamiento social y el uso obligatorio de mascarillas para niños, mientras los científicos de los NIH supuestamente recibían millones de dólares en regalías de las compañías farmacéuticas.

Cuando Wenstrup le preguntó si las vacunas contra el COVID-19 detuvieron la transmisión del virus, Fauci respondió: «Esa es una cuestión complicada porque, al principio, la primera iteración de las vacunas sí tuvo un efecto, no al 100%, no un gran efecto, pero sí previnieron la infección y, posteriormente, obviamente, la transmisión. Sin embargo, es importante señalar algo que no sabíamos al principio y que se hizo evidente con el paso de los meses, que la durabilidad de la protección contra la infección y, por ende, la transmisión era relativamente limitada».

Por su parte, el representante demócrata Jamie Raskin criticó a sus colegas republicanos por «arrastrar el nombre de Fauci por el lodo» y tratarlo «como a un convicto». Raskin agregó: «Algunos de ellos adoran ciegamente a convictos», en una aparente referencia al expresidente Donald Trump.

La audiencia se produjo después de que el Subcomité Selecto publicara la transcripción del testimonio a puerta cerrada de Fauci en enero, en el que admitió que muchas de las medidas implementadas durante la pandemia, como el distanciamiento social y el uso de mascarillas para niños, no estaban respaldadas por evidencia científica.