Estos son los crímenes que EE. UU. le imputa a Nicolás Maduro y por los que aumentó la recompensa por su captura

En los últimos años, Nicolás Maduro ha enfrentado graves acusaciones por parte de autoridades internacionales, particularmente de Estados Unidos, que lo señalan como una figura central en actividades ilícitas de gran escala. Estas imputaciones han escalado a tal punto que se han autorizado acciones específicas para abordar las irregularidades vinculadas a su entorno y a su gestión.
Entre los cargos más serios que se le atribuyen a Maduro y a su círculo cercano se encuentran delitos relacionados con el narcotráfico. Según informes y declaraciones de funcionarios estadounidenses, se le acusa de liderar una red conocida como el «Cartel de los Soles», una organización criminal que involucraría a altos mandos militares y políticos venezolanos.
Esta estructura estaría vinculada al tráfico de drogas, especialmente cocaína, utilizando el territorio venezolano como un punto clave para el trasiego de sustancias ilegales hacia mercados internacionales. Además, se le imputan cargos por corrupción, lavado de dinero y violaciones a los derechos humanos, incluyendo la represión de opositores y el uso de la violencia para mantenerse en el poder.
En marzo de 2020, el Departamento de Justicia de Estados Unidos bajo la primera administración de Donal Trump, formalizó cargos contra Maduro y otros funcionarios, ofreciendo una recompensa de hasta 15 millones de dólares por información que conduzca a su captura.
Estas acusaciones lo señalan como un actor principal en una conspiración para inundar el mercado estadounidense con drogas, lo que ha sido calificado como una amenaza a la seguridad nacional de ese país.
En la administración Trump 2.0, el presidente Trump ha instado a acciones más contundentes, incluyendo la posibilidad de considerar a esta presunta red como un objetivo militar para el Pentágono, argumentando que representa un peligro no solo para Estados Unidos, sino para la estabilidad regional.
Además de los cargos por narcotráfico, organismos internacionales y grupos de derechos humanos han denunciado reiteradamente a Maduro y su administración por presuntos crímenes de lesa humanidad. Estos incluyen detenciones arbitrarias, torturas y ejecuciones extrajudiciales, cometidas supuestamente por fuerzas de seguridad bajo su mando.
La situación humanitaria en Venezuela, con millones de personas desplazadas y una economía en colapso, también ha sido relacionada con las políticas y decisiones atribuidas al líder chavista, agravando el escrutinio internacional sobre su figura.
En febrero, la administración Trump designó como organizaciones “terroristas globales” a ocho grupos del crimen organizado de América Latina, incluido el mexicano cártel de Sinaloa, el venezolano Tren de Aragua y la pandilla MS-13.
Por su parte, el secretario Rubio, dijo en una entrevista con EWTN que las designaciones nos permiten “ahora apuntar a lo que están operando y utilizar otros elementos del poder estadounidense, agencias de inteligencia, el Departamento de Defensa, lo que sea, para apuntar a estos grupos”.
“Tenemos que empezar a tratarlos como organizaciones terroristas armadas, no simplemente como organizaciones de narcotráfico”, dijo Rubio. “Ya no es un asunto de aplicación de la ley. Se convierte en un asunto de seguridad nacional”.








