Estados Unidos forma triple alianza con Australia y Japón para enfrentar amenaza de China en el Pacífico
Con el fin de enfrentar la amenaza de China en el Pacífico, Estados Unidos formó una tiple alianza con Australia y Japón.
La medida surge en respuesta a las nuevas perspectivas bélicas en el estrecho de Taiwán.
Ahora Estados Unidos, Japón y Australia se unieron para defender sus intereses en el Pacífico.
El presidente de la República Popular China, Xi Jinping, ha dejado claras sus intenciones de no renunciar al uso de la fuerza tras conseguir integrar Taiwán a su país y parece que no va a detenerse hasta conseguirlo.
Durante estos últimos meses, el ejército chino ha llevado a cabo amplias maniobras militares frente a las costas de Taiwán y Xi ha ordenado a sus tropas que concentren sus esfuerzos en «prepararse para la guerra», reseñó 20 minutos.
Asimismo, Estados Unidos ha prometido defender la soberanía de Taiwán frente a cualquier amenaza exterior y está aumentando la ayuda militar al gobierno de Taipei, aunque en el Pentágono ya crece el temor de que China cumpla sus amenazas y trate de invadir la isla, un recelo que también comparten Japón y Australia.
Recientemente Australia y Japón firmaron una declaración conjunta en la que ambos gobiernos se comprometen a unir fuerzas para hacer frente a «contingencias que puedan afectar nuestra soberanía e intereses de seguridad regional».
Igualmente, la nación de Oceanía ve con buenos ojos la llegada de bombarderos B-52 estadounidenses, con capacidad nuclear, a su territorio, por lo que están ampliando las instalaciones de la base australiana de Tindal, al norte del país, para acogerlos.
Este viernes, se prevé que Biden y Xi Jinping se encuentren en la cumbre del G20 en Indonesia.
Ya la Casa Blanca adelantó que ambos líderes se reunirían el próximo lunes 14, un día antes de que empiece la cumbre. China no había confirmado hasta ahora ni la asistencia de Xi al G20 ni el encuentro con Biden.
Igualmente, este miércoles la Casa Blanca informó durante una rueda de prensa que Biden no hará concesiones a Xi durante la reunión y reafirmó que no busca el conflicto. Y admitió que Taiwán «seguramente» formará parte de las conversaciones con el líder chino.
No obstante, la reunión se prevé tensa pues Pekín ha insistido en que la isla es de su «interés central» y que «Washington debe ponerse a trabajar con China para evitar malentendidos y errores de cálculo».
Biden y Xi comparten una larga relación personal: ambos se conocieron hace más de una década cuando eran vicepresidentes de sus países y compartieron múltiples viajes, reuniones y cenas.
Será, sin embargo, la primera vez que se vean cara a cara desde que ambos son presidentes de sus respectivos países, aunque han mantenido dos reuniones telemáticas en el último año.