Elon Musk impulsa un boicot masivo contra Netflix por contenidos ideológicos dirigidos a niños

Netflix atraviesa una fuerte ola de críticas y cancelaciones masivas luego de que el empresario Elon Musk anunciara que cancelaba su suscripción en rechazo a lo que calificó como una peligrosa agenda ideológica dirigida a menores.
Su decisión, difundida en la red social X, desató un movimiento global que ha puesto nuevamente en el centro del debate el rol de las plataformas en la formación de los niños.
El detonante: una serie infantil con agenda de género
El 30 de septiembre, Musk —padre de una hija transgénero— escribió en X un mensaje que se volvió viral: “Cancel Netflix for the health of your kids” (“Cancela Netflix por la salud de tus hijos”). La declaración surgió tras conocerse que la plataforma ofrece la serie animada Dead End: Paranormal Park, dirigida a niños desde los 7 años, donde uno de los protagonistas se identifica como transgénero.
La producción, creada por Hamish Steele, fue señalada por miles de usuarios por promover lo que consideran una “ideología de género” entre menores.
La polémica se agravó tras difundirse declaraciones de Steele en redes sociales, donde habría celebrado con desprecio la muerte del activista conservador Charlie Kirk, a quien calificó de “nazi”. Musk reaccionó calificando al creador como “groomer”, amplificando la indignación de padres y líderes de opinión.
De un gesto personal a un movimiento masivo
Lo que comenzó como una decisión individual de Musk rápidamente se convirtió en un boicot organizado. Influencers y usuarios de X compartieron capturas de pantalla de sus cancelaciones bajo el hashtag #CancelNetflix, denunciando que la plataforma busca “adoctrinar” a los niños con contenidos progresistas disfrazados de entretenimiento.
Cuentas influyentes como @libsoftiktok y otros referentes conservadores difundieron fragmentos de la serie, alertando a las familias sobre el trasfondo de su mensaje. Según publicaciones virales, miles de suscriptores han dado de baja el servicio en cuestión de horas, configurando un rechazo que excede a un solo programa y apunta contra lo que denominan la agenda “woke” en el entretenimiento infantil.
Silencio de Netflix y antecedentes
Hasta ahora, Netflix no ha emitido un comunicado oficial. Sin embargo, el antecedente de 2020 con la película Cuties muestra que los cuestionamientos sobre la sexualización o la agenda ideológica en producciones infantiles no son nuevos. En aquel entonces, también se registró una ola de cancelaciones que, si bien luego se atenuó, dejó marcada la percepción de que la empresa prioriza un sesgo ideológico antes que el respeto a las audiencias familiares.
Más que un boicot: una batalla cultural
El movimiento impulsado por Musk refleja una batalla cultural que divide a la sociedad occidental: la representación de género y la forma en que los medios influyen en la niñez. Para muchos padres, se trata de un límite que no puede cruzarse, pues la infancia no debería ser campo de experimentación ideológica.
La magnitud del boicot aún está por verse, pero lo cierto es que el mensaje de Musk ha encontrado eco en millones de familias preocupadas por lo que sus hijos consumen. En una época donde las redes sociales amplifican cada gesto, una sola cancelación se transformó en una causa colectiva que cuestiona directamente a una de las compañías más influyentes del mundo del entretenimiento.
¿Será este el inicio de un quiebre en la relación de Netflix con el público familiar, o simplemente otra polémica pasajera? Lo que ya es evidente es que los padres conservadores están cada vez más dispuestos a plantar bandera frente a lo que consideran adoctrinamiento y una intromisión ideológica en la vida de sus hijos.