El plan de Trump para las fuerzas armadas: renovación de las cúpulas y reivindicación de los militares que no se vacunaron
El expresidente estadounidense y candidato republicano, Donald Trump, anunció el miércoles algunos de los pilares de su plan para las fuerzas armadas en caso de que regrese a la Casa Blanca en enero.
Entre las medidas que adoptará, según adelantó en un mitin en Carolina del Norte, se encuentran exigir renuncias a los principales funcionarios militares que estuvieron a cargo de la retirada de Afganistán y dar “pagos retroactivos” a los miembros del servicio que fueron despedidos por la Administración Biden tras rechazar las vacunas COVID-19.
El exmandatario de 78 años realizó sus declaraciones en la localidad de Asheboro detrás de un cristal blindado que el Departamento de Defensa y el Servicio Secreto ordenaron para todos sus eventos al aire libre después de que casi lo asesinaran el 13 de julio en Butler, Pensilvania.
El líder del movimiento MAGA no dudó en calificar la «catastrófica retirada» de las tropas de Afganistán en agosto de 2021 como “el evento más humillante en la historia» de Estados Unidos.
A diferencia de la Administración Biden-Harris, Trump prometió responsabilizar a los funcionarios militares responsables de la salida de Afganistán, país ahora gobernado por los talibanes.
“Pediré la dimisión de todos los altos funcionarios militares que participaron en el desastre de Afganistán”, anunció. “Quiero su dimisión de inmediato”, aseguró.
También criticó la decisión de la administración actual de dejar equipos en Kabul.
“Afganistán es ahora uno de los mayores comerciantes de armas del mundo entero”, expuso detallando que en el país islámico quedaron 70.000 camiones blindados y 700.000 fusiles y pistolas de las fuerzas armadas estadounidenses.
“Esta calamidad recae sobre los hombros de la camarada Kamala Harris”, argumentó. “Ella fue la última persona que estuvo en la sala con Biden cuando ambos decidieron retirarse de Afganistán”, sostuvo.
En otro tramo de su discurso adelantó que promocionará la doctrina de “paz a través de la fuerza” del expresidente Ronald Reagan, asegurando que con esta postura Washington sería capaz de prevenir futuros conflictos bélicos, como la incursión rusa en Ucrania.
«Si usted va a la guerra con otro país que es amigo nuestro -o incluso no es amigo nuestro- no va a hacer negocios en Estados Unidos y le vamos a cobrar un arancel del 100%», dijo sobre lo que le diría a los líderes mundiales que buscan un conflicto.
“He convencido al mundo de que no habrá guerras con llamadas telefónicas”, se jactó. “No tenemos por qué enviar tropas”, añadió.
Trump lamentó que las fuerzas armadas del país más poderoso del mundo se hayan vuelto demasiado “woke” y se comprometió a poner fin al enfoque en la identidad de género y la raza en el ejército.
“En la cima, son progresistas”, dijo sobre los militares de alto rango. “No queremos generales progresistas; queremos generales que sepan cómo ganar”, apuntó.
“El primer día, acabaré con la teoría crítica de la raza y la locura transgénero de nuestras fuerzas armadas estadounidenses”, prometió.
En ese sentido, afirmó: “Nuestros guerreros deberían centrarse en derrotar a los enemigos de Estados Unidos, no en descubrir su género”.
“Las ideologías marxistas no tienen cabida en el combate”, agregó.
Por otro lado, Trump prometió recontratar a los militares despedidos por rechazar las vacunas COVID bajo la Administración Biden-Harris. Sólo en el Ejército, 1.903 soldados fueron dados de baja por no vacunarse.
El año pasado, una vez finalizado el mandato de vacuna, las fuerzas armadas reincorporaron a esas tropas pero no les ofrecieron pagos atrasados.
Por eso, el candidato republicano afirmó que su gobierno ofrecerá «una disculpa y un pago retroactivo» a estos soldados.
En este marco, Trump se comprometió a realizar “la mayor campaña de reclutamiento en tiempos de paz en la historia de las fuerzas armadas”.
“En el ejército ya no hay espíritu”, afirmó. “El espíritu, el orgullo y el prestigio pronto volverán con fuerza y alcanzarán niveles nunca vistos antes”, añadió.
“Lo vamos a poner tan caliente que voy a querer renunciar y unirme al ejército”, concluyó.