‘El Mayo’ Zambada, narcotraficante del cartel de Sinaloa, morirá en una prisión de EE.UU., afirma Bondi

El histórico capo mexicano Ismael “El Mayo” Zambada García, de 75 años, se declaró culpable este lunes en una corte federal de Brooklyn, Nueva York, tras admitir décadas de crímenes al frente del cartel de Sinaloa, una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo. Con su confesión, Zambada enfrenta una condena obligatoria de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, calificó el caso como un paso decisivo en la lucha contra el narcotráfico transnacional.
“El Mayo ha confesado una vida entera dedicada al crimen en servicio del cartel de Sinaloa, una organización terrorista extranjera. Pasará el resto de su vida tras las rejas y morirá en una prisión federal estadounidense”, aseguró en conferencia de prensa en Brooklyn.
Bondi subrayó que bajo el liderazgo de Zambada, el cartel traficó toneladas de cocaína, heroína, metanfetaminas y fentanyl hacia Estados Unidos, generando miles de muertes por sobredosis. También lo responsabilizó de ordenar asesinatos, secuestros y actos de violencia extrema para proteger su imperio criminal, además de corromper a funcionarios y policías en México.
“Ellos son narco-terroristas y serán procesados como tales”, añadió.
El fiscal interino del Distrito Este de Nueva York, Joseph Nocella Jr., destacó la relevancia histórica del fallo.
“Con la declaración de culpabilidad de hoy, el cartel de Sinaloa ha sido decapitado. Sus dos fundadores y líderes, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán y ahora El Mayo, han sido condenados”, dijo.
Durante la audiencia, Zambada —vestido con un uniforme carcelario azul y con el cabello y barba grises— aceptó haber iniciado su carrera criminal en 1969 y reconoció que bajo su mando el cartel traficó más de 1,5 millones de kilos de cocaína, además de fabricar heroína y fentanyl con precursores químicos provenientes de China. También admitió que ordenó asesinatos de rivales y reconoció que “muchos inocentes también murieron”.
“Pido perdón a todos los que sufrieron o se vieron afectados por mis acciones”, declaró en español con voz baja.
Zambada fue capturado en julio de 2024 en Nuevo México, junto a Joaquín Guzmán López, uno de los hijos de “El Chapo”. El Departamento de Justicia había adelantado que no buscaría la pena de muerte contra Zambada ni contra otros líderes criminales extraditados desde México, entre ellos Rafael Caro Quintero.
La sentencia fue fijada por el juez Brian Cogan para el 13 de enero de 2026. Hasta entonces, Zambada permanecerá bajo custodia federal.
Con esta condena, las autoridades estadounidenses buscan enviar un mensaje claro en su lucha contra los cárteles.
“Su reinado de terror terminó. Nunca volverá a caminar en libertad”, concluyó Bondi.