EE.UU. actualiza política migratoria: restringen visas para hombres que compiten en deportes femeninos

El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) anunció este lunes una actualización en sus políticas migratorias que restringe la elegibilidad de visas para hombres biológicos que se identifiquen como mujeres y deseen competir en deportes femeninos dentro del país.
Según la nueva directriz, USCIS considerará como un factor negativo el hecho de que un atleta masculino haya competido en categorías deportivas femeninas al evaluar peticiones de visa en categorías como la O-1A, destinada a personas con habilidades extraordinarias, así como en las residencias permanentes EB-1 y EB-2 para trabajadores altamente calificados y quienes solicitan exenciones por interés nacional.
“USCIS está cerrando la brecha que permitía que atletas extranjeros hombres, cuya única posibilidad de destacar en el deporte de élite era cambiar su identidad de género, se beneficiaran de sus ventajas biológicas compitiendo contra mujeres», afirmó Matthew Tragesser, portavoz del organismo.
Y agregó: “Se trata de seguridad, equidad, respeto y verdad. Solo las atletas femeninas deben recibir visas para participar en deportes femeninos en Estados Unidos”.
Una medida coherente con la política federal
Esta decisión se alinea con el enfoque del gobierno del presidente Donald Trump, que ha impulsado medidas para proteger la equidad en el deporte femenino. En febrero de este año, Trump firmó la orden ejecutiva titulada “Mantener a los hombres fuera de los deportes femeninos” (Keeping Men Out of Women’s Sports), una acción que sus partidarios consideran fundamental para preservar la justicia competitiva en las categorías femeninas.
Meses después, el Comité Olímpico y Paralímpico de Estados Unidos actualizó también su política para alinearse con esta directiva, limitando la participación en competencias femeninas exclusivamente a mujeres biológicas.
En varios estados del país ya se han implementado normativas similares, especialmente en torneos escolares y universitarios, argumentando que la participación de hombres biológicos en disciplinas femeninas pone en riesgo la integridad física y las oportunidades competitivas de las deportistas.
Un debate que sigue vigente
Si bien algunos críticos acusan estas medidas de ser discriminatorias hacia un grupo reducido de atletas, sus defensores destacan que el principio fundamental de la política es proteger los derechos de las mujeres y garantizar una competencia justa.
La nueva normativa migratoria no prohíbe que personas transgénero ingresen a Estados Unidos ni limita sus derechos civiles, pero sí establece criterios específicos cuando se trata de competir en categorías deportivas femeninas de alto nivel, en casos donde las ventajas físicas derivadas del sexo biológico puedan desequilibrar la competencia.
Esta medida refuerza el compromiso de la administración Trump con la equidad, la ciencia biológica y la protección de las mujeres en el deporte profesional y amateur.